El agua es fuente de vida, y, por supuesto, también de energía.
Las posibilidades del ciclo del agua para generar energía limpia son enormes, máxime cuando hay una decidida apuesta por las energías renovables y por reducir las emisiones de CO2 a la atmósfera.
Sin embargo, esto no es una novedad para un Canal de Isabel II que se ha ido dotando de instalaciones para la generación de energía eléctrica a través de procesos sinérgicos con la gestión del agua.
Tanto es así que es la empresa con mayor potencia instalada en generación eléctrica de la Comunidad de Madrid, con casi 110 megavatios distribuidos en más de 40 instalaciones de diversa índole: centrales hidroeléctricas; microturbinas en la red de abastecimiento; depuradoras con motores y turbinas alimentadas por el biogás producido en el proceso de depuración o plantas de secado térmico de lodos con cogeneración.
Un objetivo histórico y una meta: antes de 2030
La producción de energía eléctrica vinculada a las infraestructuras hidráulicas se remonta a principios del siglo XX en Madrid. Ya en 1913 entró en servicio la central hidroeléctrica de Santa Lucía, en Torrelaguna, con 2.200 kilovatios instalados.
Esta central sigue en funcionamiento hoy en día con maquinaria renovada, pero todavía pueden verse las grandes turbinas Pelton que aprovechaban los 150 metros de desnivel del Canal Transversal a su paso por Torrelaguna para generar electricidad.
La construcción de esta primera central se complementó con una línea eléctrica de 45 kilovoltios y 70 kilómetros que transportaba la energía producida a la elevadora del Primer Depósito Elevado, en la calle Santa Engracia. Parte de la energía se utilizaba, por tanto, para alimentar las bombas de impulsión de agua. El resto de la energía se destinó a la venta.
La compañía pública madrileña aspira a convertirse en la primera empresa europea del sector capaz de producir tanta energía eléctrica como consume, y únicamente a partir de fuentes de energía limpias, renovables o de alta eficiencia. El objetivo es alcanzar este hito antes de 2030. En los últimos 4 años, Canal de Isabel II produjo, de media, un 70 % de la energía que ha consumido anualmente. En 2021 la empresa batió su récord histórico de generación de energía, con un total de 420 GWh: esta cantidad representó el 87 % de su consumo total ese año.
El Plan Solar
Canal de Isabel II está trabajando en aumentar y diversificar su estrategia energética a fin de detectar todos los yacimientos energéticos disponibles en sus instalaciones.
Por esa razón se le da especial relevancia al Plan Solar, con el que se están instalando nuevas plantas solares fotovoltaicas en infraestructuras de la compañía, para impulsar la generación y el autoconsumo de energías limpias.
La mayor parte de la producción de las instalaciones fotovoltaicas se consumirá in situ, lo que permitirá reducir la demanda eléctrica de la red de cada una de estas infraestructuras.
El Plan Solar, en sus fases iniciales (0, 1 y 2), contempla un total de 24 instalaciones con una potencia instalada de 36,35 megavatios. Supondrá una inversión cercana a los 55 millones de euros, que serán financiados en parte con fondos europeos.
Dos plantas solares son especialmente singulares. La primera de ellas es la planta fotovoltaica flotante ubicada sobre el depósito inferior de Torrelaguna. El proyecto ha supuesto la instalación de 5.700 paneles fotovoltaicos sobre una lámina de agua (con una potencia pico de 1.696 kW).
La planta flotante es la primera de estas características que se ha instalado en la Comunidad de Madrid y servirá como experiencia piloto para extender dicha tecnología a otras instalaciones de Canal en el futuro.
La otra planta fotovoltaica es la emplazada en la depuradora Arroyo Culebro Cuenca Media Alta, en Pinto. Esta instalación fotovoltaica comenzó a generar energía en julio de 2022 (produjo 515 megavatios hora en 2022) y sus paneles solares contribuirán a sostener energéticamente la futura planta de hidrógeno verde.
Producción de hidrógeno verde
El Canal de Isabel II comenzará a producir hidrógeno verde a partir de agua regenerada en 2024.
La compañía destinará más de 6 millones de euros (cofinanciados con fondos FEDER) a la construcción de su primera hidrogenera, que se levantará en Pinto, en la depuradora Arroyo Culebro Cuenca Media Alta, y su capacidad inicial rondará los 80.000 kilos anuales de hidrógeno.
Es un proyecto pionero. Y es que el Canal de Isabel II producirá el hidrógenero de esta planta a partir de agua regenerada y lo hará a través de la electrólisis, usando como fuente de energía la hibridación de dos tecnologías renovables: generación solar fotovoltaica y cogeneración de biogás procedente del aprovechamiento de residuos de la propia depuradora.
De esta manera, Canal de Isabel II podrá suministrar el agua regenerada para cubrir toda la demanda que requiere el electrolizador.
Esta hidrogenera será única porque obtendrá toda la energía necesaria para su funcionamiento de fuentes renovables, producidas en la propia instalación, y porque será la primera planta en España que utilizará agua reciclada como fuente de generación del hidrógeno, en lugar de agua potable.
Gracias a este proyecto, Canal de Isabel II abrirá una nueva ruta para la movilidad sostenible, la electrificación del transporte pesado y la descarbonización de los procesos industriales.
