Un joven de 23 años generó el caos dentro del Hospital de Valencia.
El paciente, con antecedentes penales, llegó al centro sanitario con un corte en la mano izquierda, donde fue atendido por el personal sanitario.
Sin embargo, el sujeto amenazó al médico que le atendía y comenzó a esparcir su sangre por el servicio de urgencias por estar descontento con la atención recibida.
Los agentes de la Policía Nacional lo detuvieron como presunto autor de los delitos de amenazas, desórdenes públicos y resistencia y desobediencia.
Los hechos ocurrieron de madrugada, cuando el hombre que había llegado a Urgencias con un corte sangrante en la mano izquierda fue atendido por las enfermeras. Ellas le limpiaron y taponaron la herida, siendo informado a continuación de que debía esperar ya que había pacientes de mayor gravedad.
Fue entonces cuando, al parecer, comenzó a levantar la voz, quejándose del trato recibido, y a quitarse el vendaje, esparciendo su sangre por la sala de espera y el pasillo.
Las enfermeras tuvieron que vendarle hasta en tres ocasiones, ya que no cesaba de retirarse el vendaje, indicándole que se calmase y tuviese paciencia.
El hombre no depuso su actitud agresiva, llegando a amenazar al médico de guardia diciéndole que le cortaría el cuello y que iba esperarle fuera para matarle.
Además, el ahora detenido se mostró también agresivo con los agentes, a los que salpicó intencionadamente con su sangre y a los que profirió improperios, por lo que tuvo que ser inmovilizado y detenido.
