La obsesión letal de la UE con Israel

El articulo «La obsesión letal de la UE con Israel» fue escrito por Bassam Tawil (Palestino)  y publicado por GATESTONE el 9 de marzo de 2023

 

La UE no interfiere en ningún otro lugar del planeta que no sea el Área C (en la Cisjordania), ni para los kurdos, los asirios, los yazidíes, los uigures, los cachemires, los tibetanos o los grecochipriotas. Los Palestinos continúan siendo el único grupo en la lista de la UE de personas con las que interferir. Esta atención desmesurada parece provenir no tanto del amor por los Palestinos como del odio hacia Israel.

La UE, al parecer, ha financiado literalmente miles de edificios modulares Palestinos ilegales en territorio que está legalmente bajo jurisdicción israelí.

Últimamente, la UE se ha estado concentrando más en tierras agrícolas: se puede adquirir un área mucho más grande con una inversión mucho menor.

Al hacerlo, la UE está alentando a los Palestinos a participar en acciones unilaterales en violación de los acuerdos firmados entre los Palestinos e Israel.

Esta es la misma UE que continúa advirtiendo a Israel que no tome ninguna «acción unilateral» y que continúa criticando a Israel por construir y expandir asentamientos «ilegales» en Cisjordania.

A partir de 2022, la UE ha construido 81.317 estructuras ilegales en el Área C….

El compromiso de la UE con la expansión de los asentamientos Palestinos ilegales en la Zona C persiste en total desacato de los Acuerdos de Oslo, que la UE pretende respetar.

“El objetivo es crear asentamientos Palestinos continuos en Cisjordania, eludiendo así la necesidad de negociar con Israel según lo acordado en los Acuerdos de Oslo.

Estos nuevos hechos sobre el terreno, por supuesto, alientan a los Palestinos a no negociar. ¿Por qué deberían hacerlo, si pueden obtener todo lo que quieren simplemente tomándolo?

A fines del año pasado, un documento secreto de la misión de la UE en Jerusalén Este mostró que Bruselas también está trabajando activamente con la Autoridad Palestina y en su nombre para tomar el Área C de Cisjordania.

Koopmans y otros altos funcionarios de la UE aparentemente saben que están actuando ilícitamente: están haciendo todo lo posible para ocultar el hecho de que están ayudando activamente a los palestinos a infringir la ley y violar los acuerdos firmados con Israel.

 

El Representante Especial de la Unión Europea para el Proceso de Paz en Medio Oriente, Sven Koopmans, declaró el 17 de febrero: «La UE quiere construir lazos más fuertes con Israel, pero lamentablemente las relaciones siguen lastradas por la construcción de asentamientos ilegales en tierra palestina».

Lo que Koopmans olvidó mencionar es que son los palestinos quienes han construido literalmente decenas de miles de estructuras ilegales en Cisjordania, especialmente en el Área C, que, según los Acuerdos de Oslo, está bajo plena jurisdicción civil y de seguridad israelí.

Koopmans también olvidó mencionar que la UE está ayudando a la Autoridad Palestina (AP) con la construcción ilegal a gran escala, allanando el camino para la anexión de facto del territorio.

A modo de trasfondo: bajo los Acuerdos de Oslo, Cisjordania se dividió en tres zonas, no poéticamente denominadas Áreas A, B y C, mientras se estaban llevando a cabo negociaciones para una solución permanente a las fronteras. El Área A está bajo control Palestino total, el Área B está bajo control Palestino además de la seguridad. El Área C es oficialmente un área israelí que aún debe negociarse.

 

Los enviados de varios países de la UE expresaron recientemente su preocupación por las «acciones unilaterales» de Israel y, a principios de este año, Josep Borell, Alto Representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, pidió a Israel que evite las «acciones unilaterales», incluidas las actividades de asentamiento y la demolición de estructuras Palestinas ilegales, especialmente en la zona de Cisjordania de Hebrón.

Cuando los Palestinos se quejan de las «acciones unilaterales», se refieren a las medidas antiterroristas de Israel y a la construcción de nuevos hogares para las familias judías. Los Palestinos no quieren que las fuerzas de seguridad israelíes persigan a los terroristas. Tampoco quieren ver a Israel construyendo casas para judíos.

El Ministerio de Inteligencia de Israel, sin embargo, encontró en un informe recientemente desclasificado, que

«Los gobiernos extranjeros dieron cientos de millones de euros a proyectos Palestinos en el Área C en Judea y Samaria… Tal financiación es contraria al derecho internacional y los acuerdos pertinentes… [E]l informe describe cómo los Palestinos utilizan los fondos de la UE para construir miles de estructuras ilegales y apoderarse de franjas de tierra agrícola..»

La UE, al parecer, ha financiado literalmente miles de edificios modulares Palestinos ilegales en territorio que está legalmente bajo jurisdicción israelí. Además, la UE nunca ha ocultado su política de apoyo a los Palestinos en sus esfuerzos por apoderarse de tierras prohibidas y construir estructuras ilegales en el Área C de Israel.

 

En 2012, la UE desarrolló, por primera vez, una política integral relacionada con el Área C, seguida de un conjunto de pasos y acciones concretos.

Entre 2016 y 2019, la UE proporcionó un total de 33 millones de euros (35 millones de dólares) a «asistencia humanitaria y de desarrollo para apoyar a los Palestinos que viven en el Área C».

La UE dice que también trabaja con la Autoridad Palestina para «desarrollar» el Área C. La UE agrega que «apoya proyectos que promuevan el desarrollo económico y mejoren la calidad de vida de las comunidades Palestinas en el Área C en las áreas del sector privado, el medio ambiente y la agricultura».

La UE admite abiertamente que está ayudando a los Palestinos a infringir la ley mediante la construcción de estructuras ilegales en un área que está oficialmente bajo la plena soberanía israelí.

Al hacerlo, la UE está alentando a los Palestinos a participar en acciones unilaterales en violación de los acuerdos firmados entre los Palestinos e Israel.

Una organización no gubernamental israelí, Regavim, ha documentado «5535 nuevas estructuras ilegales construidas en 2022, en comparación con 3076 estructuras en el mismo período en 2021», en un año, casi el doble.

En los últimos años también se han erigido innumerables casas modulares Palestinas financiadas por la UE en lugares alrededor de Jerusalén y Cisjordania. Estas estructuras ondean una bandera de la UE y exhiben cientos de carteles y pegatinas de la UE.

 

«Junto con esta construcción ilegal a gran escala, dispersa en una inmensa área geográfica, fenómenos adicionales están alimentando la anexión de facto del territorio por parte de la Autoridad Palestina, proyectos agrícolas ilegales masivos en tierras del estado israelí, la guerra financiada por preocupaciones extranjeras… y un movimiento coordinado campaña de presión internacional. Todos estos son elementos de una estrategia calculada, llevada a cabo bajo los auspicios de la Autoridad Palestina con el objetivo declarado de crear hechos sobre el terreno en apoyo de una declaración unilateral del Estado palestino, asestando un duro golpe a la soberanía nacional de Israel. en intereses y seguridad».

 

“El objetivo es crear asentamientos Palestinos continuos en Cisjordania y, por lo tanto, aislar y estrangular a las comunidades israelíes”, escribió Hillel Frisch, profesor de Ciencias Políticas e Historia del Medio Oriente en la Universidad Bar-Ilan, en 2019.

“Por primera vez en los 100 años de conflicto entre el movimiento sionista (y más tarde el Estado de Israel) y los árabes Palestinos, los Palestinos están superando a los Judíos en asentamientos estratégicos, sobre los cuales el movimiento sionista había disfrutado de un monopolio. La Autoridad Palestina está logrando esto bajo los auspicios de la UE».

En abril de 2012, el Ministerio de Gobierno Local de la Autoridad Palestina publicó un plan de acción estratégico titulado «Planificación del apoyo a las comunidades palestinas en el Área C». La UE anunció su apoyo a este plan en un documento oficial llamado «Desarrollo de Tierras y Acceso a Infraestructura Básica en el Área C».

Frisch señaló que ya en 2016, la UE ya había gastado un total de 10,5 millones de euros [USD 11 millones] para elaborar e implementar planes de zonificación para 90 asentamientos Palestinos y apoyar proyectos de desarrollo de tierras en el Área C en conjunto con la Autoridad Palestina.

“El principal objetivo de la AP-UE es claro: crear asentamientos árabes continuos desde el sur hasta el norte de Cisjordania, al tiempo que frustra los planes israelíes de crear vecindarios continuos desde Ma’ale Adumim hasta Jerusalén (el plan E-1).

“Los logros de la Autoridad Palestina han sido considerables hasta ahora. A medida que los nuevos edificios israelíes se reducen a la insignificancia en las áreas al este de Jerusalén, la Autoridad Palestina, con la ayuda europea, ha logrado albergar a decenas de miles… en un espacio no mayor a nueve kilómetros cuadrados. Este número es más del doble del número de habitantes en Ma’ale Adumim y las otras localidades israelíes en el área.

«Al este de Ma’ale Adumim, la Autoridad Palestina y la UE han identificado campamentos beduinos improvisados, el más destacado es al-Khan al-Akhmar, como el arma principal con la que transformar el Área C en un estado Palestino. Estos campamentos de rápido crecimiento están cerca de una carretera principal y carecen de sistemas de alcantarillado y eliminación de basura organizada. Las autoridades israelíes han designado un área justo al sur de Abu Dis que proporcionaría todas estas comodidades, sin embargo, la Autoridad Palestina y la UE continúan apoyando los campamentos beduinos».

Khan al-Ahmar sería un arma principal porque se encuentra a pocos metros de la carretera que conecta Jerusalén con el Mar Muerto y el Valle del Jordán. Los Palestinos quieren que Khan al-Ahmar se convierta en un asentamiento Palestino que aislaría a Jerusalén de estas áreas y luego rodearía la ciudad con comunidades Palestinas.

La UE y los Palestinos están actuando de acuerdo con un programa lanzado en 2009 por el ex primer ministro de la Autoridad Palestina, Salam Fayyad.

El «Plan Fayyad» de 2009 (oficialmente titulado «Palestina: poner fin a la ocupación, establecer el Estado») fue, y sigue siendo, una propuesta para crear hechos sobre el terreno que terminarían como un Estado Palestino si las negociaciones no funcionan. , eludiendo así la necesidad de negociar con Israel según lo acordado en los Acuerdos de Oslo.

El problema es: si los palestinos creen que alguna entidad externa, como la UE, puede otorgarles un estado sin costo alguno para ellos, ¿por qué deberían molestarse en negociar? Durante años, de hecho, han evitado sentarse a la mesa de negociaciones, presumiblemente con la esperanza de obtener precisamente esa ganancia inesperada.

Algunos ocupantes ilegales beduinos de Jahalin también representaron un medio perfecto para establecer un punto de apoyo extrajudicial.

Los mejores intereses de los beduinos Jahalin no eran la principal preocupación de la Autoridad Palestina. Lo que era importante para la Autoridad Palestina era la tierra: tomar posesión de ella y luego hacer que todo lo que se construyera sobre ella pareciera irreversible. Entonces, mientras la Autoridad Palestina y la UE continúan hablando sobre un acuerdo negociado para el Área C (las áreas A y B ya están bajo control palestino), la construcción ilegal en el Área C, que está oficialmente bajo soberanía israelí, con las fronteras finales por negociar. estos nuevos hechos sobre el terreno, por supuesto, alientan a los palestinos a no negociar. ¿Por qué deberían hacerlo, si pueden obtener todo lo que quieren simplemente tomándolo?

Con la ayuda del generoso apoyo de los estados miembros de la UE y los países árabes, la Autoridad Palestina también ha lanzado una serie de «iniciativas nacionalistas», enfocándose en áreas rurales y secciones desoladas del Área C. Se invirtieron esfuerzos concertados en áreas estratégicas que tendrían la mayor impacto en las reivindicaciones palestinas de soberanía de facto.

Según Naomi Kahn, directora internacional de Regavim:

«Los europeos pagan por la planificación. Pagan por la ingeniería. Pagan por el apoyo legal. Pagan por la infraestructura. Pagan por la construcción, aunque saben que es ilegal, e incluyen en los contratos la posible demolición. también incorpore representación legal en el contrato siempre y cuando llegue a los tribunales porque es ilegal».

El plan unilateral de Fayyad para crear hechos sobre el terreno es una violación total de los Acuerdos de Oslo, que establecen que «ninguna de las partes iniciará ni tomará medida alguna que cambie el estatus de Cisjordania y la Franja de Gaza mientras se espera el resultado del estatus permanente». negociaciones».

“El establecimiento unilateral de hechos sobre el terreno por parte de los palestinos socava por completo la posición de apertura de Israel para cualquier acuerdo negociado”, advirtió Regavim. La UE, sin embargo, parece claramente decidida a continuar con el Plan Fayyad ilegal para ayudar a los palestinos con sus acaparamientos de tierras y construcciones ilegales a gran escala.

A fines del año pasado, un documento secreto de la misión de la UE en Jerusalén Este mostró que Bruselas también está trabajando activamente con la Autoridad Palestina y en su nombre para tomar el Área C de Cisjordania. Según el documento:

«El programa del Área C de la UE tiene como objetivo fomentar la resiliencia de las personas, los servicios y las instituciones [palestinas], para reforzar la presencia palestina en el Área C y proteger los derechos de los palestinos que viven en el Área C».

Es hora de denunciar la malicia hipócrita de funcionarios de la UE como Sven Koopmans, que continúan acusando a Israel de tomar «acciones unilaterales» y construir asentamientos «ilegales». Koopmans y otros altos funcionarios de la UE aparentemente saben que están actuando ilícitamente: están haciendo todo lo posible para ocultar el hecho de que están ayudando activamente a los palestinos a infringir la ley y violar los acuerdos firmados con Israel.

Así como Israel no se entromete en los asuntos internos de los estados miembros de la UE, es hora de poner fin a la venenosa intrusión de la UE en el conflicto israelí-palestino.

En el camino, la UE también podría querer considerar la fuente real de su obsesión letal con Israel.

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Autor

Shimshon Zamir

Nacido en Argentina. Vive en Israel desde 1972. Casado... tres hijas... 8 nietos. Trabajó 30 años en la industria Química Israelí, hoy pensionado. Graduado en Sociología.

Shimshon Zamir

Nacido en Argentina. Vive en Israel desde 1972.
Casado... tres hijas... 8 nietos.
Trabajó 30 años en la industria Química Israelí, hoy pensionado.
Graduado en Sociología.

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