"Tenemos un programa que hacemos a medias entre el presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Diosdado Cabello, y nosotros, porque ha tenido a bien responder de nuevo a nuestros saludos desde España"
Parecía que se había puesto fin a la guerra mediática iniciada desde Venezuela contra ‘El Programa de Ana Rosa’, pero nada más lejos de la realidad. En los medios de comunicación estatales del país chavista gusta mucho aquello de encontrar enemigos externos al régimen, generar esos fantasmas y hacerlos engordar.
Todo el tiempo que dedican en las escaletas de los programas del régimen bolivariano a hablar de problemas con enemigos ficticios, ese tiempo que ganan porque no pueden dedicarse a solventar los problemas internos. Por esto el mismísimo Diosdado Cabello, presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, la cara visible de su programa ‘Con el mazo dando’, se ha convertido en fan incondicional del espacio líder de las mañanas en Telecinco.
Varios cruces de declaraciones televisivas se han venido dando en las últimas semanas, con acusaciones graves desde los medios chavistas y con respuestas no sin humor desde ‘El Programa de Ana Rosa’ —Ana Rosa se toma a chacota los ataques del chavismo: «¡Parece que ponemos en peligro la revolución bolivariana!»–, —Ana Rosa se parte con la última ofensiva dialéctica desde Venezuela: «¡Diosdado Cabello parece de ‘Los Picapiedra’!»–.
Una nueva batalla llega desde Venezuela, y como no podía ser de otra manera la propia Ana Rosa Quintana respondió en la mañana de 5 de mayo de 2015, con ironía pero precisamente, ‘dando con el mazo’:
«Tenemos un programa que hacemos a medias entre el presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Diosdado Cabello, y nosotros, porque ha tenido a bien responder de nuevo a nuestros saludos desde España. Es un honor comprobar una vez más la audiencia que este programa (Señor Cabello, que usted sabe perfectamente como me llamo, lo que pasa es que hace como que no lo sabe) tiene en Venezuela».
Así arrancaba entre risas de los contertulios el discurso de Quintana. Pero después cambiaba el semblante la presentadora para decir cosas bien claras:
«La verdad es que el Señor Cabello, si no fuera porque representa al régimen que representa en Venezuela, y que tiene a opositores en la cárcel, tiene gracia».