Si cambiamos el antes
por el después
comprobando los vientos
de esas decenas
moviendo pesos ceden
sobre las cúspides
después de que la lupa
más centenaria
avance y el retorno
después se pierda
después de que fabriquen
con trama y fuerza
esas ausencias llenas
que todos notan
después de que la imagen
gane el instante
después que lo descarten
expone al fin
y con la hoja en la almena
surge la chispa
en provincias dormidas
el gigante varado
como el anhelo
se despierta en la orilla.
José Pómez
http://pomez.net