Bokabulario

Leyes de género: no existen denuncias falsas, qué va

¡Qué individua! Denunció por acoso a su ex novio…. que por fortuna para él estaba muerto.
(@pfbarbadillo)

Las feminazis y los vividores de la industria del maltrato nos aseguran de que no hay denuncias falsas en los casos por la mal llamada violencia de género. Pues aquí tienen otro, ocurrido en Oviedo y contado por El Comercio.

Una individua, que ya había presentado 12 denuncias por maltrato contra otros dos hombres, denunció a finales de septiembre a su último novio/pareja/pareja de hecho/pareja de desecho/compañero sentimental por acoso e insultos, contra el que había conseguido una orden de alejamiento.

Movilización de la Policía, búsqueda del pobre desgraciado para meterle en el calabozo y ponerle a disposición judicial. Lo que no hacen las autoridades policiales y judiciales con el terrorista Bolinaga ni los inmigrantes ilegales lo hacen con los hombres denunciados.

No se le encuentra. Cruce de datos… que tampoco se hace, por ejemplo, las distintas administraciones sanitarias españolas. Y se descubre que el señor había fallecido cuando la señora dijo que le había amenazado. En caso contrario, habría sido llevado al calabozo y presentado ante el juez para probar él, no la denunciante, que no había amenazado a esta despreciable; además, este caso se habría añadido a las estadísticas oficiales de violencia estructural masculina sobre las mujeres.

A la mentirosa se la detuvo por presuntos delitos de denuncia falsa y de simulación del delito. Y ya tenía antecedentes por ellos. Pero es que las leyes y los protocolos de actuación impuestos a policías y jueces por el feminazismo establecen la detención inmediata del hombre denunciado por una mujer, sin más pruebas que la palabra de ésta.

Se ha creado una industria del maltrato de la que viven mujeres sinvergüenzas, abogados, psicólogos, ONG y funcionarios. ¡Hasta hay inmigrantes que conseguían papeles y subvenciones mediante denuncias falsas!

El domingo estuvo Zapatero en televisión haciendo de bobo solemne. Entre sus inmensas estupideces durante sus años de desgobierno (gracias a 11 millones de moscas) estuvieron las leyes de violencia de género, que el PP no ha modificado en absoluto. Semejante aberración jurídica, que traslada la carga de la prueba al denunciado (siempre un hombre heterosexual), sigue vigente, con la sanción del Tribunal Constitucional. ¿Cuántos hombres discriminados por las leyes de género votaron en 2008 a esta calamidad y cuántos lo hicieron en 2011 a su sucesor en el PSOE?

CODA: Para conocer qué hay detrás de esta construcción ideológica de la violencia de género (aquí lo explica Amnistía Internacional) y las leyes penales, es imprescindible la lectura de este ensayo de Fernando Vaquero, víctima del feminazismo: El hembrismo como estadio final del marxismo, publicado en la revista Razón Española. Sus creadores, hombres y mujeres, buscan no sólo poder y dinero, sino la destrucción de la familia.

Este hembrismo cotidiano, práctica común de una ideología muy elaborada, ha dividido el mundo en buenos y malos. Las mujeres sumarían todas las virtudes: intuitivas, transmisoras y controladoras de la vida, pragmáticas, sensitivas, pacíficas. Los hombres, ya se sabe, brutales, inconscientes cazadores y guerreros, indolentes, insensibles, violentos, imprevisibles, infieles: en consecuencia, hay que anticiparse… y controlarlos desde el Estado y el control social informal. Los hombres, por ello, a no pocas de esas feministas, les sobran. A ellas y a sus hijas.

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Autor

Pedro F. Barbadillo

Es un intelectual que desde siempre ha querido formar parte del mundo de la comunicación y a él ha dedicado su vida profesional y parte de su vida privada.

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