Este 12 de junio de 2014, Kiko Méndez-Monasterio escribe en La Gaceta una columna titulada ‘La ETA que viene’ en la que arranca diciendo:
El debate sobre la ley de abdicación ha sido la imagen perfecta del tiempo político, que obliga a reformular la sentencia de Alfonso Guerra: hoy el que no se mueve -hacia la izquierda- no sale en la foto.
Añade que:
Lo único positivo que se puede decir sobre el parlamento actual es que el que lo sustituya dentro de un tiempo será todavía peor.
Y concluye que:
En vez de la inteligencia fría -química- del faisán Rubalcaba, oiremos a Eduardo Madina, que es Pablo Iglesias vestido de limpio.