Un cinismo rampante asola Europa. Obligados a cultivarla, la emoción se presenta en los medios de masas como la negación de la razón; se defienden las emociones como clave de la decisión. De ahí, la amenaza: las máquinas nos robarán el trabajo, por más que ese trabajo resulte inútil. El progreso no consiste en que aumente el ocio que se confunde con entretenimiento si no el ocio que consiste en dar tiempo al juicio antes de la acción, para evitar la ejecución impulsiva de un acto. La mente es esencialmente simulación simbólica, examen previo de los efectos de la acción.
Cuando el impulso se impone al juicio, la consecuencia es ignorar las consecuencias de la acción, de este modo haciendo del emocionado un pelele a manos del azar, sin capacidad alguna para sobreponerse o imponerse a los eventos que luego se suceden anticipándolos y poniéndoles en contexto para evitar los mayores daños que siempre resultan de los mayores desatinos. Aumentan las creencias irracionales, mágicas, y así cualquier deseo deviene en crisis, se niega lo real. El tipo de crisis transexual del fascismo sanchista. Ocurre, por el contrario, que lo real es lo que emerge imprevisto, planteando al ser humano el reto de comprender el suceso, en lugar de someterse a un designio divino fuera de su alcance.
La cultura del desatino beneficia a cuantos dictadores emergen en la sombra de la propaganda que concita emociones en lugar de juicios racionales. No hay enemigo pequeño del que no quepa temer lo peor; tanto vale el virus ignorado de Koch, como esas bacterias que Pasteur pensaba eran el origen único de las infecciones. Sobran ejemplos para mostrar de que modo se impone la emoción a la razón, esa emoción que Darwin conocía como el residuo de un pasado adaptativo en el que el hombre enfrentaba los hechos como amenazas, como fantasmas. Se ignora la antropología cuando se ignora de que modo los humanos sacralizan lo que no comprenden, como cuando divinizaron la ayuda arrojada por aviones en la hambruna de Biafra. También será así en Gaza, como única manera de librarse de quien les hace rehenes. ¿No es mejor examinar las consecuencias, antes de adentrarse en el ejercicio involuntario del impulso irracional, dictado por deseos que el actor no comprende?. El sujeto dell inconsciente freudiano.
¿Si el sujeto no confía su acción al ejercicio de la acción racional, que clase de concesión cabe hacer, como decía Hegel, para considerar humano a quien es unicamente guiado por su instinto?.¿Que clase de sociedad humana puede ser aquella donde cada sujeto actúa como le da la real gana?. Contraviene la evolución humana ignorar que cada vez es mas extensa la corteza cerebral asociativa en detrimento de las estructuras mas antiguas del cerebro, como el rinéncefalo.
Pues ahí está la actuación histérica de Juana Rivas imponiéndose a la ley y a la razón en un típico ejemplo de alienación parental. Juana Rivas de nuevo protagonista. ¿Por qué nadie se pregunta por los recursos que obtiene Juana Rivas a cuenta de sus hijos? ¿Cómo explota la fuente de sus recursos?. Le ha tocado en suerte un hombre digno, victima que se repite de la secta de Infancia Libre. ¿Por qué se oculta en la noticia, qué tipo de recompensa obtiene de sus hijos como rehenes cuando impone un indulto a un Consejo de Ministros presidido por el criminal Sánchez y cuando trata de imponerse a un Sistema Judicial para que bendiga la impunidad de sus delitos, el de secuestro permanente de sus propios hijos?. ¿Que se dirá cuando con el tiempo veamos a su hijo secuestrado, dudar de sí mismo, de su orientación sexual, por mor del histrionismo contumaz de su «atribulada virgen» madre? Pues consintamos la agonía de la protagonista sin caer en la trampa.
La estrategia del sátrapa. Substituir la razón por la emoción. Administrar la información hasta que la razón se extinga. Sánchez no solo secuestra la libertad, la libertad de prensa, y el beneficio del secreto periodístico. Se consuela a sí mismo con encuestas manipuladas y juegos de artificio para simular su ejecución ocultando en que modo contribuyen a la riqueza pública las masas no cualificadas de quienes son llamados a votarle. Por eso indulta al canalla, por eso administra el narcotráfico, administrando su persecución, por eso administra la okupación, y la miseria. ¿Que clase de delirio sodomita alimenta el sometimiento a las bajas pasiones de débiles humanos, y como se aprovecha de esas pasiones el puto machirulo jefe de la mafia?. Asistamos a su juicio, a la agonía del protagonista. Impongamos la razón a la emoción, al cinismo. Basta de acusar de cruel a quien examina sus acciones y sus efectos, en lugar de explotar el sentimiento de culpa.
¿Por qué nadie se pregunta en virtud de qué condiciones podría darse un Estado Palestino, el mito denunciado por Mosab Hassan Youseff, el hijo de Hamás, condenado a muerte por su propio padre, ese mito de un Estado Palestino ampliamente divulgado por la que una fracción irredenta y talibán trata de imponer el velamiento a las mujeres y convertirlas en esclavas sexuales en la Sharía universal del mundo musulmán?. Los vientres de sus mujeres acabarán con la civilización occidental. Ya se impuso Mahoma con violencia, como se impusieron Lenin y Stalin en la Rusia que alimenta a un heredero nazi, como Putin. Lloremos por los muertos desconocidos que causan los sátrapas, no por sus rehenes. Lloremos por los muertos que causa el que debería morir primero, como protagonista. Es esa violencia la que fascinaba a George Sorel como un instrumento político de conquista del Estado. Violento es que las imágenes abyectas de los inquilinos de Gaza sirvan al propósito de Hamás cuando concita las emociones sobre la miseria de su pueblo secuestrado.
¿Como es posible concebir un pueblo rehén de la caridad universal que mantiene las ayudas a quienes emplean sus recursos para construir tuneles por los que transitan asesinos y terroristas, en lugar de usar esos recursos para invertir en su futuro?. ¿Podemos llorar por cuántos seres humanos mueren cada día sometidos al dictado de sus próceres criminales empeñados en matar a quienes les traen vacunas y someten a sus mujeres a servir de vientres de alquiler?. Un pueblo se organiza en Estado cuando su unidad nace de procurarse por sí mismo los recursos de su supervivencia. ¿Que esperamos de mantener en nómina a un ejército de quienes sufren de amputomanía, de Apotemnofilia, del deseo de amputarse una parte sana del cuerpo que viven como ajena, intrusiva, o incongruente con su imagen?. ¿Como puede avalarse la renuncia al pensamiento racional, como en ese cuento de Papini, Gog?. ¿Solo son felices los ignorantes?
¿Cómo puede el macronismo, el sanchismo y el putinismo alzarse en favor de Hamás poniendo en nómina a quienes podrían construir su libertad sin someterse a los canallas que administran sus alimentos y explotan su muerte?. ¿Cómo puede imponerse un cretino como Sánchez para suministrar recursos, robados a sus ciudadanos, los mismos de los que se alimenta, si están predestinados al mantenimiento de una oligarquía que explota la credulidad y la miseria ajenas?.
Como puede ser tan estúpido el Papa incumbente, que abdica del ejercicio de la razón invocando la compasión, la caridad, la moral de los esclavos, que lejos de ponerse quiere imponer la emoción a la razón. ¡Qué vergüenza de su diálogo con Valerio Rossi para suscitar un humanismo irracional, sin futuro! ¿No es mejor dotar de recursos a quien puede aprovecharlos, a un hombre racional que, como invocara Diego Laínez en Trento, reniega de la predestinación del protestantismo, donde la fe basta para salvarse?, Un hombre protagonista de su futuro, no un accidental parásito. ¿Que nos hace libres? ¿El hallazgo, el descubrimiento, la explicación?, ¿O la fe del esclavo condenado a vivir aquello que le sucede y no entiende, invocando a un Dios desconocido y cruel tan alejado de sí mismo como el hombre supersticioso y mágico lo es de sí mismo?. No hay nada mas estúpido que confiar en un Dios que sólo podría ser el Dios de los judíos, un Dios personal, vengativo. ¿Para cuando el Dios de Spinoza?.
