El equipo de Xavi Hernández tuvo que superar obstáculos tempranos en un partido que se vislumbraba complicado frente a un Betis muy sólido en defensa. Sin embargo, la gran actuación de Joao Félix, quien debutó con un gol y una asistencia en su primer partido oficial, resultó crucial para desbloquear la situación.
El inicio del enfrentamiento no fue un camino sencillo para los hombres de Xavi, ya que luchaban por penetrar la sólida línea defensiva del Betis, a pesar de tener el control de la posesión y el juego. Los pupilos de Manuel Pellegrini tenían una estrategia clara: defender bien y buscar oportunidades de ataque con Willian José.
Los béticos inicialmente sufrieron la alta presión del Barcelona, pero con el tiempo entraron en el partido y generaron oportunidades claras a los quince minutos de juego. En primer lugar, Luiz Henrique perdonó un disparo cruzado desde el interior del área que rozó el poste izquierdo. Luego, Ayoze Pérez, desde una posición similar, estrelló un disparo sin ángulo en el lateral de la red de la portería de Ter Stegen.
Sin embargo, en el momento más complicado para el Barcelona, apareció su nuevo fichaje, Joao Félix, quien demostró su valía desde sus primeros minutos con el equipo. El primer gol llegó con un centro al corazón del área de Oriol Romeu. Aunque el portugués no logró un remate limpio de primera, la pelota quedó suelta y aprovechó la lenta salida de Ruiz Silva para driblar al portero portugués y anotar desde un ángulo imposible.
El segundo gol llegó apenas cinco minutos después, nuevamente gracias a una brillante acción de Joao Félix. Se posicionó de espaldas en la frontal del área, pero dejó pasar el pase de Cancelo por debajo de sus piernas para que Lewandowski recogiera el balón en el punto de penalti y marcara fácilmente.
Un aguerrido Betis estuvo a punto de empatar el partido
El Betis, que parecía estar en problemas, se reactivó al final de la primera mitad y tuvo dos oportunidades para empatar el partido, ambas en los pies de Willian José. El delantero brasileño primero envió un disparo desde el interior del área por encima del travesaño y luego se encontró con una gran parada de Ter Stegen en un remate a quemarropa tras un centro perfecto de Isco.
La segunda mitad comenzó de manera accidentada para el Betis, ya que Pellegrini tuvo que hacer entrar a Vieites, portero del filial, debido a una lesión de Rui Silva. La dinámica del juego fue muy similar al inicio de la primera mitad, con el Barcelona manteniendo el control absoluto del balón.
A pesar de que el Barcelona calmó el ritmo del partido, continuaron generando ocasiones para poner a prueba al joven guardameta del Betis. Ferran y Cancelo perdonaron con disparos desviados desde el corazón del área, pero Joao Félix no desaprovechó un rebote y anotó lo que habría sido el tercer gol, aunque fue anulado por fuera de juego.
El Betis se desdibujó por completo y, en un momento defensivamente frágil, cometió una falta en la frontal del área que resultó en el tercer gol. Ferran ejecutó un tiro con efecto que evadió la barrera por el lado contrario al portero Vieites.
Xavi buscaba más goles y realizó cambios en el equipo, dando entrada a Yamal, Gundogan y Raphina. Este último se encargó de redondear la goleada con un tiro desde la frontal que se coló en la meta del Betis con un bote complicado.
Con el cuarto gol, la competencia se desvaneció y el Barcelona se adueñó del partido, mientras que el Betis luchaba por encontrar respuestas. En una especie de campo de pruebas para el Barcelona, Joao Cancelo se aventuró en el ataque y completó la goleada. Recorrió la banda derecha, realizó un doble regate magistral para eludir a Miranda y disparó con potencia para sentenciar el partido a diez minutos del final.