Daba clases de Corán en su casa y le pegaba a menudo unas palizas de espanto
Al clérigo Muhammad Sharif, de 42 años, le está buscando la policía de la ciudad de Multán, en Pakistán, después de que cortara en 10 pedazos -con el cuchillo que empleaba para matar animales- a su esposa Farzana Bibi, de 36, madre de sus tres hijos.
El hombre, según informa ‘The Express Tribune‘, daba clases de Corán en la casa escenario de los hechos y donde vivían, y dejó sobre el cadáver una nota antes de darse a la fuga, explicando los motivos de tan bárbara acción:
«Tenía que castigarla por no cumplir las órdenes de Alá. Todas las mujeres deberían aprender con mi ejemplo».
NO SE PONÍA EL VELO
El clérigo se refería, entre otras cosas, a que su pobre esposa salía a la calle sin cubrirse la cara con el velo, portando ‘tan sólo’ una ‘abaya’, una prenda que cubre todo el cuerpo.
Además se quejaba con frecuencia de que sus hijos asistieran a un colegio inglés, en vez de haberles inscrito su mujer en un seminario religioso, razones que le sacaron al final de sus casillas.
El cuerpo de la fallecida le fue entregado a su familia tras practicarle la autopsia de rigor.