El rostro de Marisa Navas irradiaba satisfacción al dirigirse a la prensa esta mañana desde lo alto de la escalera central del histórico edificio madrileño de Gran Vía, 28. Justificada, porque la responsable de Comunicación de Telefónica ha presentado el, sin duda, más espectacular escaparate tecnológico del mundo. Y, encima, venden teléfonos, como el iPhone que la operadora lanza en exclusiva en España este viernes 11 de julio. Esta tarde, la presentación oficial correrá a cargo del presidente de Telefónica, Alierta (en la foto superior), y del alcalde de Madrid, Gallardón.
Si la tienda de Apple en la esquina de Central Park de Manhattan, a pocos metros del Hotel Plaza, es ya una visita turística incluída en muchas guías, la de Telefónica en Gran Vía 28 la superará en breve como una de las principales atracciones lúdicas de Madrid para turistas y residentes en la capital.
Pero no sólo hace sombra a Apple, sino también a la mismísima Microsoft y su oficina del futuro, el pionero EMO Center que exhiben orgullosos a las afueras de Madrid en la sede de la filial española. La zona de domótica que ha montado Telefónica en la segunda planta de Gran Vía 28, que no estará abierta al público sino sólo para visitas guiadas, es sobrecogedora.
Representa dos casas en las que un mayordomo virtual da la bienvenida encendiendo las luces y el aclimatador, soluciona los problemas que surjan en la cocina, controla consumo energético y todas las funciones del hogar, nos ayuda a entretenernos en pantallas 3D, videoconferencias por la televisión plana con otras casas… y así hasta todo lo inimaginable.
INAGURACIÓN PLANIFICADA PARA EL LANZAMIENTO DEL IPHONE
Telefónica ha convertido su histórico edificio situado en el número 28 de la Gran Vía madrileña, en una tienda de más de 3.000 metros cuadrados que se abrirá al público el próximo viernes, coincidiendo con el lanzamiento del teléfono iPhone 3G.
Esta tienda, presentada por Telefónica como «el espacio de telefonía más grande y vanguardista del mundo», estará abierta de 10.00 a 22.00 horas casi todos los días del año y en ella trabajarán más de 90 empleados.
En la planta baja del edificio se encuentra la zona comercial, con 9 puestos de asesoramiento y distintas áreas dedicadas a los productos para familias, el hogar, el entorno profesional de negocios, artículos audiovisuales, zona para viajeros y un espacio reservado para niños.
«Zona de experimentación»
En la planta alta se encuentra la «zona de experimentación», con las soluciones de domótica, para pymes y autónomos, para profesionales que viajen con asiduidad y una zona de asesoramiento técnico. También en este piso se encuentra el auditorio, que tiene una capacidad para 100 personas.
Todavía están en obras la tercera y cuarta plantas del edificio, con un total de 4.000 metros cuadrados que estarán destinados al arte y a la cultura con los fondos propios de la compañía y las distintas exposiciones temporales de la fundación.
Para la remodelación del edificio, Telefónica ha tenido que mantener intacta su apariencia antigua, por lo que toda la estructura de la tienda se ha construido sobre los suelos, paredes y techos del histórico inmueble, de forma que si se quita lo construido para la tienda, el edificio recuperaría su apariencia anterior.
Un edificio singular
Este ha sido uno de los requisitos impuestos por el Ayuntamiento de Madrid para permitir la remodelación del edificio. También obligó a Telefónica a incluir en el suelo de la tienda zonas acristaladas, para que los visitantes puedan ver el suelo antiguo.
La sede de Telefónica en la Gran Vía madrileña es un edificio diseñado en 1925 por Ignacio Cárdenas y Lewis S. Weeks a imitación de los rascacielos de Nueva York.
