Sí, lo han entendido vuesarcedes: son unas chirigotas o cuchufletas que ha escrito uno el día 6 de julio de los años 2010, 2011 y 2013. Es decir, el día antes de la fiesta de San Fermín de los años citados uno difundió estos tres posts en Periodista digital que dejaron patidifusos a los lectores. Fueron estos:

De cómo se encuentra mi señoría.

(o “Paracetamol, que no paraZP”).

Pero, ¡coño!, si se lo tengo dicho a vuesarcedes: cuando no sepan el significado de las cultas palabras que mi señoría utiliza en sus excelentes chirigotas, acudan a www.rae.es y apréndanlo; no se lo pregunten a mi señoría, y además, por teléfono. Hombre, no. Sobre todo porque le indigna a uno que desconozcan palabras tan corrientitas como anamnesis, que si no se usa veinte veces al día no se usa nunca. No parece sino que son lectores catalanes o vascos o vaya a saberse de dónde, que creen que con vuesarcedes no va el mandato constitucional (Título Preliminar, artículo 3, apartado 1) que dice que “el castellano es la lengua española oficial del Estado. Todos los españoles tienen el deber de conocerla y el derecho de usarla”. Pues eso que quede bien claro.

¿Lo de la anamnesis? Que tiene que mirarlo cada quién, ¡caramba!

En efecto, mi señoría les cuenta lo que me ha dicho el doctor acerca de mi ´acarajotamiento´. Me ha asegurado que sí, que es senil, porque habiendo cumplido los 82, ¡qué menos que ser senil! Es más: me decía que antes esta enfermedad era senil a partir de los 60 años, pero que ahora habían subido la edad. Es algo parecido, por ejemplo, al IVA. ¿No lo han subido a partir de este mes? Pues lo mismo. Y luego me preguntaba que si mi señoría tenía antecedentes de rojos en mi familia, porque en el análisis de sangre daba una cifra muy alta de hematíes, y que los hematíes son los glóbulos rojos.

-¿Su señoría no habrá tenido algún abuelo socialista, como dizque que tuvo el señor Rodríguez, el todavía -y no se sabe hasta cuándo- Presidente del Gobierno de España?– me dijo.

-Pues la verdad, doctor, que no lo sé.

-Y otra cifra que tiene disparada es la del colesterol, pero éste es que puede ser del bueno o del malo. Sí, eso: como los políticos. Uno, el HDL es el bueno, o sea, como para su señoría puede ser Rajoy; y el LDL, el malo, como…, bueno, esos que pillan que han cometido cohechos pasivos, prevaricaciones, blanqueo de capitales, tráfico de influencias, malversación de fondos, etc. Hay muchos, tanto a su diestra como a su siniestra mano. No: como Bono, no, porque de lo que cuentan de Bono no hay ninguna prueba, y cuando él mismo dice que son calumnias, pues serán calumnias. Además, que no ha intervenido en el caso ni el Fiscal General del Estado, ni nada, o sea, que no es ni ´presunto´ siquiera, porque hay algunos que por lo menos son ´presuntos´, que ya es algo, por si acaso luego resulta que…, pero aquí, res de res. Es decir, que ´ni forgoten do peluco´, dicho sea en esperanto.

Y también, lo que da un valor elevado en su analítica es el PSA (el Por Si Acaso, que dicen vuesarcedes, los viejos), que es un marcador tumoral que a nosotros, a los doctores en Medicina y Cirugía, ambas inclusive, nos evalúa el Prostatic Specific Antigen (Antígeno Prostático Específico) y por él vemos cómo van los pacientes de la cosa de la próstata. Un 6. Y no conviene pasar de 4…

¿Tratamiento? Bueno, ya tiene el de señoría… Ah, ¿para su dolencia…? Pues siguiendo los consejos de Hipócrates, mi diagnóstico es que, en efecto, padece un ´acarajotamiento senil multiforme crónico´, que su señoría está bastante pachucho o deteriorado, que tome paracetamol de 1 gramo para los dolores (no, lo del paraZP y sus muchachos son impuestos o gravámenes) y que beba mucha agua, porque si bebe whisky le va a salir bastante más caro y va a notar que se marea o se desnorta, con lo que se puede pegar una torta.

Y lo dicho fue todo. Vuesarcedes igual hubieran o hubiesen preferido que me hubiera o hubiese dado por inútil total, con prohibición expresa de volver a escribir chirigotas de éstas para que no les torturara o torturase a vuesarcedes tan asiduamente, pero por ahora no ha sido así todavía. Pues “a jo” y “a agua”. ¿O no?

6-07-2010.  

Como segunda chirigota, esta:

De cómo se encuentra mi señoría.

(o “Paracetamol, que no paraZP”).

Pero, ¡coño!, si se lo tengo dicho a vuesarcedes: cuando no sepan el significado de las cultas palabras que mi señoría utiliza en sus excelentes chirigotas, acudan a www.rae.es y apréndanlo; no se lo pregunten a mi señoría, y además, por teléfono. Hombre, no. Sobre todo porque le indigna a uno que desconozcan palabras tan corrientitas como anamnesis, que si no se usa veinte veces al día no se usa nunca. No parece sino que son lectores catalanes o vascos o vaya a saberse de dónde, que creen que con vuesarcedes no va el mandato constitucional (Título Preliminar, artículo 3, apartado 1) que dice que “el castellano es la lengua española oficial del Estado. Todos los españoles tienen el deber de conocerla y el derecho de usarla”. Pues eso que quede bien claro.

¿Lo de la anamnesis? Que tiene que mirarlo cada quién, ¡caramba!

En efecto, mi señoría les cuenta lo que me ha dicho el doctor acerca de mi ´acarajotamiento´. Me ha asegurado que sí, que es senil, porque habiendo cumplido los 82, ¡qué menos que ser senil! Es más: me decía que antes esta enfermedad era senil a partir de los 60 años, pero que ahora habían subido la edad. Es algo parecido, por ejemplo, al IVA. ¿No lo han subido a partir de este mes? Pues lo mismo. Y luego me preguntaba que si mi señoría tenía antecedentes de rojos en mi familia, porque en el análisis de sangre daba una cifra muy alta de hematíes, y que los hematíes son los glóbulos rojos.

-¿Su señoría no habrá tenido algún abuelo socialista, como dizque que tuvo el señor Rodríguez Zapatero, el todavía -y no se sabe hasta cuándo- Presidente del Gobierno de España?– me dijo.

-Pues la verdad, doctor, que no lo sé.

-Y otra cifra que tiene disparada es la del colesterol, pero éste es que puede ser del bueno o del malo. Sí, eso: como los políticos. Uno, el HDL es el bueno, o sea, como para su señoría puede ser Rajoy; y el LDL, el malo, como…, bueno, esos que pillan que han cometido cohechos pasivos, prevaricaciones, blanqueo de capitales, tráfico de influencias, malversación de fondos, etc. Hay muchos, tanto a su diestra como a su siniestra mano. No: como Bono, no, porque de lo que cuentan de Bono no hay ninguna prueba, y cuando él mismo dice que son calumnias, pues serán calumnias. Además, que no ha intervenido en el caso ni el Fiscal General del Estado, ni nada, o sea, que no es ni ´presunto´ siquiera, porque hay algunos que por lo menos son ´presuntos´, que ya es algo, por si acaso luego resulta que…, pero aquí, res de res. Es decir, que ´ni forgoten do peluco´, dicho sea en esperanto.

Y también, lo que da un valor elevado en su analítica es el PSA (el Por Si Acaso, que dicen vuesarcedes, los viejos), que es un marcador tumoral que a nosotros, a los doctores en Medicina y Cirugía, ambas inclusive, nos evalúa el Prostatic Specific Antigen (Antígeno Prostático Específico) y por él vemos cómo van los pacientes de la cosa de la próstata. Un 6. Y no conviene pasar de 4…

¿Tratamiento? Bueno, ya tiene el de señoría… Ah, ¿para su dolencia…? Pues siguiendo los consejos de Hipócrates, mi diagnóstico es que, en efecto, padece un ´acarajotamiento senil multiforme crónico´, que su señoría está bastante pachucho o deteriorado, que tome paracetamol de 1 gramo para los dolores (no, lo del paraZP y sus muchachos son impuestos o gravámenes) y que beba mucha agua, porque si bebe whisky le va a salir bastante más caro y va a notar que se marea o se desnorta, con lo que se puede pegar una torta.

Y lo dicho fue todo. Vuesarcedes igual hubieran o hubiesen preferido que me hubiera o hubiese dado por inútil total, con prohibición expresa de volver a escribir chirigotas de éstas para que no les torturara o torturase tan asiduamente, pero por ahora no ha sido así todavía. Pues “a jo” y “a agua”. ¿O no?

6-07-2010.

Y la tercera cuchufleta:

Entre comisiones y robos, ¡pobres ciudadanos probos!

(o “Quien haya insaculado, que devuelva lo robado”).

La verdad es que mi señoría no acaba de entender a este Gobierno. Y no será porque no les votara uno y se alegrara sobremanera de que tuvieran mayoría absoluta. Así podrán gobernar, porque si no… Eso pensamos vuesarcedes y mi señoría, pero a medida que pasa el tiempo vamos comprobando que ni con mayoría absoluta. ¡Qué atajo de inútiles…! Pero si es que no dan ni una en el blanco… Y, ¿la oposición? ¿Qué me cuentan vuesarcedes de la oposición? Eso: que salimos de Málaga y nos metemos en Malagón. O sea, que tampoco el congrio es mal ave. No les digo más que mi señoría está estoicamente horripilado. Hay algo, sin embargo o no obstante, en lo que se le podía dar una nota alta a entrambos partidos políticos mayoritarios , es decir, a los del PP y a los del PSOE, ambos inclusive, si a bien lo tienen y el que avisa no es traidor (sí, son latiguillos que he). Hoy mismo, estando ya estoicamente horripilado como se ha dicho, no he podido por menos que quedarme anonadado cuando leído he, en varios periódicos, que la Vicepresidenta del Gobierno , en la rueda de prensa de después del Consejo de Ministras y Ministros, ambos inclusive, nos ha comunicado que “se dio luz verde a la creación de una comisión de expertos para hacer una revisión completa del sistema actual (refiriéndose al sistema tributario) y presentar sus propuestas en un informe que deberá estar terminado en febrero de 2014”. ¡Anda!, otra comisión. Es decir, que las ministras y ministros, que tienen mogollón de asesores de los que ahora, en teoría debían estar despidiendo a una buena parte, para aliviar en lo posible el gasto que ello supone, ahora que todo el mundo está convencido de que la etiología de parte de nuestra ruina económica es el exceso de personal de las administraciones de ámbito nacional, autonómico, provincial, municipal, rural y otras, va el Consejo de Ministras y Ministros y da “luz verde” a la creación de “otra” comisión, nada menos que de nueve catedráticos, que seguro que no van a cobrar ni un euro… Ni un euro, ni dos , ni tres, sino miles cada uno. Y mi señoría se pregunta: Pero bueno, ¿para qué están los funcionarios? ¿No hablan del adelgazamiento de las administraciones? Mi señoría no sabe hasta qué ´point´ será cierto, pero es que me han asegurado que con el dichosito estado de las autonomías, España ha pasado de tener unos 600.000 funcionarios a los más de 3.000.000 que tiene actualmente. ¿Es que, entre esos 3.000.000 no hay nueve expertos que puedan realizar el estudio en cuestión para la reforma fiscal y es necesario recurrir a personas ajenas a la administración como tal, aunque todos sabemos que los catedráticos son funcionarios? Y ¿qué me dicen vuesarcedes de las cohortes de asesores que tienen estos personajes de chichinabo? Además, si los están echando para que ´adelgace´ la administración, ¿qué sentido tiene poner gente en la calle y contratar a otros para la realización de tareas como ésta a la que nos venimos refiriendo? Como Penélope: tejer y destejer.

Otra de las cosas por las que uno vive un sinvivir continuo y me temo que a vuesarcedes les acontece algo parecido, es la que se refiere a la casi inexistente costumbre de la restitución. A diario sabemos de uno o de varios personajes (o entidades, da igual) que se han apropiado de algo ajeno, que les han pillado e incluso les han puesto a la sombra, es decir, les han metido en el trullo por haber distraído unos miles o millones de euros. Bueno, pues el sentir generalizado -y es lo que más duele a la ciudadanía- es que de devolver lo insaculado (de in-1 y el lat. saccŭlus, saquito),nada. En este país de SSS (y con esto no quiero decir Soraya Sáenz de Santamaría por la ayuda que dizque que esta dama haya podido prestarle a Prisa, sino que me refiero a señores seguros y sanos): en este país, repito, al parecer, todo el mundo se teme que quienes roban, al menos en una inmensa mayoría, se van de rositas. Y por eso, mi señoría propone que a todo aquel que se le pille en cualquier acto de trinque, sustracción o robo, en particular de fondos públicos, sean de índole herpatológica o de otra clase parecida, que en lugar de darle cualquier colgajo o abalorio (collares, cruces, etc.) que haga alusión a S. M. la Reina Isabel la Católica o similar, se le obligue a ingerir una fuerte dosis de algún eficaz vomitivo, en el sentido médico de la palabra, es decir, que ingiera alguna sustancia de las “que se aplican para provocar el vómito”, para que así, los cacos, en lugar de irse de rositas, no se vayan, sino que se queden en la cárcel hasta que devuelvan el último maravedí que robado hayan. Sólo eso, tanto para la derecha como para la izquierda, incluidos los extremos, el centro y sus aledaños. Es decir, que en todo caso, devuelva lo que haya insaculado (o metido en su saco). Y, colorín colorado, este cuento se ha acabado. ¿O no?

Otras cuchufletas de posible interés: «Tolerancia cero en trinque, defraudación y despilfarro», «Clima de corrupción generalizado» y «La corruptela por la pela».

6-07-2013.

Y, por hoy, stop. No olviden vuesarcedes que para que el contraste entre cómo protegió Rodríguez Zapatero a España y cómo lo está haciendo ahora el Doctor Pedro Sánchez; para que ese contraste sea justo, equitativo y saludable hay que tener en cuenta las fechas en que ocurrieron los hechos y quiénes detentaban el poder en cada caso. ¿O no?

6-07-2023.