Inglaterra es uno de los pocos lugares, además de las zonas de guerra, donde aumenta el riesgo de muerte de los bebés. Un análisis de las ubicaciones de estas muertes ha demostrado que es un efecto directo de la pobreza, que ha sido responsable de 500 muertes adicionales antes de la edad de uno en los últimos años. Los hallazgos son una advertencia para todo el mundo de que no podemos dar por hecho la mejora de la salud infantil, según recoge iflscience y comparte Paula Dumas para Periodista Digital.
En cualquier debate sobre si el mundo está mejorando o empeorando, la caída de la mortalidad infantil es la exhibición A para los optimistas. Una vez, casi la mitad de los niños murieron antes de los cinco años, hoy en día es un 4 por ciento a nivel mundial y cae rápidamente. Por lo tanto, es sorprendente descubrir un aumento en la mortalidad infantil en el lugar donde comenzó la revolución de la salud infantil.
La tasa de muertes infantiles en el Reino Unido sigue siendo 100 veces menor de lo que era antes de las vacunas, el agua limpia y los antibióticos, pero cuatro aumentos anuales sucesivos no pueden considerarse un problema. El profesor David Taylor-Robinson de la Universidad de Liverpool buscó las causas y descubrió que todo se trata de la pobreza.
No hace falta un análisis estadístico para ver que algo ha salido muy mal en la tendencia de dos siglos a menos muertes infantiles, coincidiendo con el aumento de la pobreza. Taylor-Robinson y otros / BMJOpen
Ciertamente no es noticia que los pobres tengan expectativas de vida más cortas que las clases medias y altas. Sin embargo, cuando Taylor-Robinson y sus colegas desglosaron las muertes infantiles por parte de la autoridad del consejo local, descubrieron que el aumento se produce por completo en las áreas más pobres, ampliando la brecha de salud basada en los ingresos.
Entre 2014 y 2017, 572 bebés adicionales murieron en el Reino Unido más allá de los números predichos por la tendencia anterior, casi todos en el 20 por ciento más pobre de los consejos.
En BMJ Open, Taylor-Robinson señala muchas decisiones gubernamentales que podrían haber contribuido a esta situación, incluyendo: «La abolición de la prestación por hijos y el crédito tributario por hijos para el tercer hijo o más … y topes familiares en el recibo total de beneficios (independientemente de cuántos los niños están en el hogar) ”. Notablemente, señala el artículo, una revisión de Public Health England sobre el aumento de las tasas de mortalidad ni siquiera consideró la pobreza como una posible causa.
Con un 30 por ciento, la pobreza infantil inglesa es tres veces mayor que la de Escandinavia o Austria.
«Estos hallazgos son realmente preocupantes dado que la pobreza infantil está aumentando. Es hora de que el gobierno revierta esta tendencia al establecer un sistema de bienestar que proteja a los niños de la pobreza», dijo Taylor-Robinson en un comunicado.
