El presidente de BBVA, Francisco González, reconoció este martes que España «tiene una excelente reputación en ajustes fiscales», si bien todavía quedan algunas medidas por adoptar por parte del Ejecutivo.
Así lo expresó González durante su intervención en la sesión de Consejeros Regionales de BBVA Bancomer celebrada en México DF.
Pero quedan tareas pendientes por impulsar, detalló, como profundizar en el ajuste fiscal mediante una reforma del sistema de pensiones y la sanidad pública; concluir con éxito reformas estructurales clave como la del mercado de trabajo o reestructurar el sistema de cajas.
En este sentido, dijo que España tiene una «oportunidad única» para introducir estas reformas, que permitirán corregir muchos de sus desequilibrios históricos.
Por otra parte, González subrayó que la entidad «está preparada para liderar los cambios de la industria financiera del siglo XXI».
«La innovación y la tecnología nos permiten ofrecer un nuevo modelo de relación con los clientes sencillo y basado en una distribución física y virtual, en el que el cliente se beneficia del banco», señaló González.
El máximo ejecutivo de BBVA destacó que la Unión Europea y el euro saldrán «muy reforzados de la crisis» una vez se apliquen las medidas de austeridad fiscal, se consolide el desapalancamiento del sector privado, se fortalezca el sector financiero; y se consiga una mayor coordinación de las políticas fiscales europeas.
En este entorno, «BBVA lo ha hecho muy bien», dijo Francisco González, quien añadió que «tenemos una rentabilidad superior a la de nuestros competidores, un nivel de eficiencia a la cabeza de la industria financiera (un 40,4%) y una posición de solvencia (un 13,4%) y de liquidez muy fuertes».
Todo ello, recordó González, sin ningún tipo de ayuda pública, ni capital, ni liquidez, ni avales por parte del Estado.
