La teoría de las inteligencias múltiples del profesor Howard Gardner resulta muy atractiva. Valida académicamente la disparidad de las capacidades humanas a la hora de utilizar el intelecto. Unos aprenden de una manera y otros, de otra. Aunque contestada, es una teoría que abre paso a valorar la diversidad de los talentos en las escuelas. Explica, por ejemplo, que unos alumnos puedan ser buenos en unas cosas y no en otras. Y que razonablemente cada individuo tiene un talento especial y que descubrirlo y cultivarlo puede ser parte central de su misión en la vida.
(Véase el libro de Gardner «Estructuras de la mente»