Por fin un pooco de sentido común ( ‘MariconezGate’: El Gobierno Sánchez, el del ‘Marlaska maricón’ dice que lo de Mecano es homofobia).
Lo que no tiene nada de raro en Boris Izaguirre porque es bastante más inteligente, mucho más culto y tienen el triple de reflejops que la ine¡msna mayoría de los personajillos con los que, muy a nuestro pesar y quizá al suyo, comparte pantalla televisiva de vez en cuando (‘OT’: La cara de Ana Torroja en medio de la polémica de «mariconez» es todo un poema).
Boris presentará el nuevo programa de DKISS, ¡Sí, quiero ese vestido!, que se estrenará el 11 de noviembre de 2018 a las 21.00. El escritor venezolano vuelve a presentar un espacio en la televisión española después de pasar varios años afincado en EEUU (Carlos Herrera: «Y luego el problema en España es que una canción de Mecano dice ‘mariconez'»).
En la producción de Shine Iberia, más de 50 novias de distintos estilos, etnias u orientaciones sexuales elegirán el vestido para el día de su boda y contarán sus historias en un programa cuya temática atrajo desde el principio a Boris Izaguirre:
«Aquí las mujeres son ellas y esta es mi forma de retribuir todo lo que han hecho las mujeres por mí».
Boris, que actualmente concursa en Masterchef Celebriy, saltó a la popularidad hace veinte años en Crónicas marcianas.
Como recoge Merce Moreno en el ‘Economista’ este 27 de octubre de 2018, muchas cosas han cambiado desde entonces, en la televisión y en la sociedad, como se demostró recientemente en OT por el revuelo que generó el intento de cambio de letra de Quédate en Madrid de Mecano, propuesto por María Villar.
«Cuando conozca a María, le daré un beso y le diré que, aunque entiendo que es un insulto, a mí nunca me han importado mis mariconeos. Mis mariconeos me han llevado muy lejos».
«He hecho de mi amaneramiento una señal absoluta. De mi sexualidad, una conversación».
«Yo pienso que los 80 eran más libres. Me parece perfecto que una persona de 20 años crea que la palabra [mariconez] sea homofóbica, pero en el contexto de la canción no lo era: no quiere caer en cursiladas y ahora llama en diminutivo a su pareja».
Boris Izaguirre cree que «debemos ser más relajados con lo políticamente correcto», aunque celebra el debate iniciado por la concursante del talent show de La 1:
«me parece muy bien el planteamiento de ella y cómo se solucionó todo, porque vengo de vivir en un país donde el debate es más difícil».
Boris Izaguirre inicia esta nueva etapa como presentador de ¡Sí, quiero ese vestido!, pero continúa participando en Masterchef, donde se ha erigido como mediador en la tensa relación entre Carmen Lomana y Antonia Delle’atte:
«No deja de ser una exploración en la psiquis femenina, de la que soy un apasionado».
