Llega el buen tiempo, el verano y, por fin, nos volvemos a reencontrar con amigos y familia, para brindar por la salud y la vida. Para refrescar estas reuniones de verano y hacer ese ansiado brindis, la bodega PAGOS de ARAIZ (perteneciente a Masaveu Bodegas), nos propone su Pagos de Araiz Rosé 2019, un vino ligero, moderno, afrutado y fresco que recuerda a los mejores rosados provenzales, pero con firma española.
Pagos de Araiz Rosé nada tiene que envidiar a la sutileza de los vinos rosados de la Provenza francesa, que tan buenas críticas reciben y tanta presencia tienen en los más prestigiosos restaurantes y vinotecas del mundo. No hay verano en la Provenza en el que no se brinde con una copa de un rosado pálido como este y no hay excusa tampoco, en los meses en los que más aprieta el calor, para no saborear esa misma elegancia aquí en España, con Pagos de Araiz Rosé. Como buen rosado navarro tiene esa capacidad de complacer, con enorme versatilidad, a todo tipo de paladares, por su carácter refrescante y actual.
Pagos de Araiz Rosé ofrece esa visión moderna y adaptada al tiempo que vivimos por su sabor fresco, vibrante y placentero. Estas sensaciones no solo se notan al catarlo, sino que también se perciben al apreciar su diseño, con una etiqueta moderna adaptada a los gustos de los consumidores. Con un atractivo color salmón pálido resultando muy brillante, la variedad de uva 100% garnacha le otorga unos aromas característicos, entre los que destacan los de fresas silvestres y frambuesas frescas. Se perciben también notas de flores blancas con ligeras y suaves sensaciones de gominola de cítricos.
En boca, tiene una entrada viva y fresca, siendo plena y golosa, destacando la presencia de frutas frescas rojas, sensaciones de fresas y grosellas. El paso por boca es largo, con un final afrutado y persistente que invita a continuar saboreando.
Es un vino que acompaña perfectamente a cualquier tipo de comida, desde aperitivos, quesos, o embutidos hasta comidas más copiosas como pastas, arroces o carnes blancas, y se recomienda tomar a una temperatura entre 8 y 10 grados.
En el año 2000 comienza, en la tradicional DO Navarra, un proyecto fresco y atrevido, con la adquisición de la Finca Pagos de Araiz por la familia Masaveu. Esta apuesta comenzó con la construcción de una bodega absolutamente vanguardista y de estilo château situada en una finca de 400 hectáreas a las afueras de la villa medieval Olite. Su innovadora forma de gestión y una amplia oferta enoturística, conecta PAGOS de ARAIZ al peso histórico, natural y vitivinícola del entorno con el arte y la gastronomía. Es el marco ideal de un futuro brillante y prometedor, vinculado a los valores de Navarra, territorio vitivinícola clásico y emergente al mismo tiempo.
PVPR: 6 euros
