Un niño iraquí de cinco años, que llegó a Barcelona el pasado mes de enero gracias al proyecto solidario ‘El avión de la vida’, ha sido dado de alta tras ser sometido a un trasplante de médula ósea en el Hospital Vall d’Hebrón de la capital catalana.
Al pequeño no se le había podido establecer diagnóstico definitivo en su país y requería de transfusiones sanguíneas mensuales que acabó diagnosticándole una anemia diseritropoética congénita, una enfermedad cuyo tratamiento curativo pasa sólo por el trasplante de médula ósea.
Después de diversas pruebas, se determinó que un hermano era histocompatible con sus células y el niño fue operado el pasado 13 de septiembre.
Aunque la evolución ha sido satisfactoria, el pequeño tendrá que continuar sometiéndose a controles médicos periódicos, por lo que, hasta que pueda volver a su país, residirá en un centro destinado a acoger niños que necesitan tratamientos continuados en el hospital.
El Vall d’Hebrón ha atendido, en el marco de esta campaña solidaria, a un total de trece menores iraquíes de entre tres y quince años que llegaron a primeros de año afectados por distintas patologías graves y enfermedades urológicas, cardiológicas, oftalmológicas y hematológicas, entre otras.
