IRIS NUNCA DECEPCIONA
Por alto que el listón ponga,
Ya en la oficina, ya en casa,
La nueva altura la pasa;
Y, aunque unas veces rezonga,
Bailando acaba la conga,
Porque Iris no decepciona;
Los golpes los recepciona
Cual la excelsa encajadora
Que es; sería embajadora,
Pero el cargo no ambiciona.
Ángel Sáez García