Los que vivimos en Castilla sabemos muy bien que uno de lo mayores errores de la Transición fue dividir a Castilla en cinco regiones autónomas para complacer las demandas de los partidos nacionalistas. Nada de una Castilla fuerte demográfica, industrial, política y culturalmente, con 17 provincias cuya capital fuese Madrid. No, una Castilla central y fuerte no convenía a los nacionalistas que sabían muy bien cuáles eran sus planes futuros. Y el Estado cedió.
Así, fruto de esta estupidez, nacieron, además de otras, Castilla y León y Castilla- La Mancha. Yo personalmente me quedé encogido bajo una mesa esperando el inmediato advenimiento de Castilla-La Tierra de Campos, por ejemplo. O Castilla-La Alcarria, que también vale. Si esas diecisiete provincias estuviesen en una sola autonomía, con sus correspondientes diputados y senadores en el Parlamento central la España de hoy sería muy distinta y tal vez nos estaríamos ahorrando algunos de los problemas que tenemos. Aquella cesión nos marcó para siempre.
A Zapatero le parece poca cesión. Ahora ya intenta convencer a sus visitantes monclovitas de lo bueno que sería que hubiese ciudadanos “vasconavarros”. Lo cuenta el Semanal Digital: Zapatero le planteaba a un conocido empresario si tenía algún problema en ser castellano y leonés (Yo siempre me he preguntado cómo se puede ser castellano y leonés al mismo tiempo, qué misterio. ¿Un señor de Soria, Segovia o Palencia –pura Castilla- es también leonés?) «Entonces –prosiguió el jefe del Ejecutivo-, ¿qué problema puede haber con que uno diga que es a la vez ciudadano del País Vasco y de Navarra?».
Pregunta para lectores intrépidos: Ahora que De Juana ya está en el País Vasco, ahora que se acercan elecciones locales y forales ¿Cuál va a ser el próximo paso –político- de Zapatero?
_-_-_-_-_-_-_-_-_-_ A las 18’20
Esta mañana en Onda Cero le han vuelto a preguntar a Zapatero sobre la cuestión y negó haber pronunciado estas palabras. El caso es que se marchó diciendo de nuevo aquello ya tan manido de que los navarros serán lo que quieran ser. Y digo yo que ésa no es la cuestión a debate. Los navarros nunca van a ser lo que digan los almerienses o los tinerfeños, claro está. Pero el presidente del Gobierno no contestó a si sus parlamentarios navarros se iba a aliar con los parlamentarios abertzales, no, a eso no contestó, no hubo manera. Porque si se da esa coalición postelectoral, antes no se atreverán, ya sabemos cuál va a ser el futuro que en nombre de sus votantes navarros van a decidir entre todos ellos. Al tiempo.