El Gobierno de Ucrania ha decidido la evacuación obligatoria de la región de Donetsk, en el este del país, después de llevar meses siendo el objetivo principal de los bombardeos rusos.
El presidente Zelenski ha pedido a sus ciudadanos que «confíen» en él y salgan de allí para conseguir que el Ejército de Putin tenga «menos tiempo para matar a personas».
En un discurso pronunciado a última hora de la noche, Zelenski ha dicho que los cientos de miles de personas que aún se encuentran en las zonas de combate en la región más amplia de Donbás tienen que marcharse. Asimismo, el presidente de Ucrania ha pedido a los combatientes que continúan en la zona que se marchen de allí.
Los servicios de inteligencia británicos han alertado este sábado de que las autoridades rusas en Ucrania se están preparando para celebrar referendums de anexión a su país a finales de este año en los territorios ocupados recientemente en el sur. Mientras se sigue esperando la salida del primer barco con cereal ucraniano.
Las autoridades instaladas por Rusia en los territorios recientemente ocupados en el sur de Ucrania se estan preparando para celebrar referéndums para unirse a Rusia a finales de este año, dijo el ejército británico el sábado.
«Es probable que las autoridades locales coaccionen a la población para que revele detalles personales con el fin de componer los registros de votación», ha dicho el Ministerio de Defensa en una actualización de inteligencia en Twitter.
Rusia clasifica estas áreas ocupadas como bajo «administración civil-militar» interina. Es probable que Ucrania haya repelido los ataques rusos a pequeña escala desde la línea del frente establecida desde hace mucho tiempo cerca de Donetsk, en la región oriental de Donbas, mientras que en el área de Kherson, Rusia probablemente ha establecido dos puentes de pontones y un sistema de transbordadores para compensar los puentes cercanos dañados en los últimos años.
Los principales diplomáticos de Estados Unidos y Rusia discutieron el viernes un acuerdo negociado por las Naciones Unidas para reiniciar el envío de granos desde Ucrania y aliviar una crisis alimentaria mundial en su primera llamada telefónica desde antes de que Rusia invadiera a su vecino el 24 de febrero.
El ministro de Relaciones Exteriores, Sergei Lavrov, le dijo al secretario de Estado, Antony Blinken, que Washington no estaba cumpliendo sus promesas con respecto a la exención de alimentos de las sanciones, dijo el Ministerio de Relaciones Exteriores. Un relato ruso de la llamada telefónica citó a Lavrov diciéndole a Blinken que Rusia lograría todos los objetivos de su «operación militar especial», y diciendo que el suministro de armas occidentales a Ucrania solo prolongaría el conflicto.
Blinken advirtió a Lavrov sobre cualquier reclamo territorial ruso durante su guerra en Ucrania. «El mundo no reconocerá las anexiones. Impondremos costos significativos adicionales a Rusia si sigue adelante con sus planes», aseguró.
