El regidor de Orense, Gonzalo Pérez Jácome, ha acostumbrado a sus vecinos a que la gestión municipal esté envuelta en polémicas, salidas de tono, insultos en los plenos o no someterse a preguntas de la prensa y dar explicaciones sólo en su propio canal de YouTube.
Le vimos una vez incluso en televisión nacional montando un buen cisco a Risto Mejide.
Enfado en conductores y bomberos
Comenzando por lo más reciente, los conductores orensanos están en el punto de mira de Jácome. Y es que al afán recaudatorio de las multas de tráfico que tienen todas las administraciones públicas, se suma que en los presupuestos municipales para 2026 el regidor orensano pretende incrementar los ingresos por sanciones de tráfico nada menos que un 34%. Parece que Jácome ya sabe de antemano cuánto van a vulnerar el código de la circulación sus vecinos y las multas que podrá interponer por ello.
Claro que para lograr el incremento en la recaudación por multas, habrá que ver si el hasta ahora interventor municipal está por la labor de ejecutarlo. Y es que el alcalde ha cesado al funcionario que tenía como misión fiscalizar el gasto del Ayuntamiento de Orense con la acusación de que obstaculizaba su trabajo, para recolocarle en el departamento que interpone las multas a los conductores. Se da la circunstancia de que el cese llegó tras la denuncia interpuesta por el interventor contra el alcalde por acoso laboral.
Otro departamento municipal que está en disputas con el alcalde son los bomberos municipales. En el último pleno celebrado en el consistorio, los bomberos protestaron por impagos y precariedad laboral y Jácome despachó el tema acusando a los bomberos de cobrar mucho y estar preocupados sólo de su sueldo.
Esta polémica del mes de mayo llega precedida por la que ha protagonizado en el mes de abril de este mismo año cuando Jácome dijo que «llamar jugadores negros a jugadores negros no es racista».
Sospechas constantes de corrupción
Estas salidas de tono generan mucha repercusión en las redes sociales, no así las sospechas e investigaciones sobre presunta corrupción. En 2024, La Fiscalía abrió diligencias contra Jácome por supuesta malversación de fondos públicos, tras una denuncia de excompañeros de su partido.
Se le acusó de compatibilizar su sueldo como alcalde con ingresos privados. La Fiscalía ha derivado el asunto al Tribunal de Cuentas y estamos a la espera de novedades. No obstante, otro motivo de sospecha contra el actual regidor es que en 2022 contratase como asesora a la esposa del juez que le investiga por un presunto caso de malversación de 100.000 €, lo que ha levantado sospechas de conflicto de intereses.
Estas sospechas producidas en 2024 ocurrieron tras conocerse en 2023 unos audios donde el propio Jácome presumía de saber cómo blanquear dinero para campañas electorales, hablando de manejar donaciones y fondos «oficiales o en B» .