Atropello a las libertades de los españoles. El Ejecutivo de Pedro Sánchez ha vuelto a liarla con otra de esas ocurrencias que solo pueden surgir del magín de un presidente del Gobierno que no tiene plan y que tiene que justificar su estancia en La Moncloa a base de disparates liberticidas, tal y como destacan este 14 de noviembre de 2018.
Antonio Burgos define el cacao que está montando Sánchez con cada medida que adopta, entre ellas lo de la prohibición de matricular vehículos a partir de 2040 que no sean meramente eléctricos:
Vivimos gobernados por unos indocumentados. Si tuvieran que pagar el impuesto de Actos Jurídicos Indocumentados por cada salida de pata de banco, se acababa el déficit. Vamos que si se acababa.
Ramón Pérez-Maura le mete un palo al gobierno prohibicionista de Pedro Sánchez:
Vivimos coaccionados por una izquierda sin legitimidad electoral que cada día anuncia una nueva prohibición y la jalea con su máquina de propaganda mediática. No aspiran a convencer al elector porque saben que engañar no es tan fácil. Así que emplean los instrumentos del poder para imponer sus políticas de prohibición. Si es tan bueno para todos que desaparezcan los vehículos de combustión, ¿por qué no ponen en marcha los incentivos necesarios para seducir a la industria y a los clientes para que renuncien a los vehículos malignos y apuesten por los buenos? ¿Acaso intentan hacernos creer que todos queremos el mal menos ustedes que son los únicos que quieren el bien y nos lo impondrán por decreto? Por favor…
La Razón le mete un buen palo al Ejecutivo sanchista:
El mayor problema de estos legisladores abonados al voluntarismo y sin otro instrumento eficaz que el de la prohibición es que las consecuencias benéficas entran en el campo de los futuribles mientras que los perjuicios son de riguroso presente. Cuando se anuncia desde la alegría política del «largo me lo fiais» el cese forzoso en 22 años de la producción de automóviles de combustión interna -incluidos los híbridos- se pone en riesgo grave el futuro a corto plazo de una industria, la del automóvil, que en España supone 300.000 puestos de trabajo, 17 grandes fábricas que generan el 10 por ciento del PIB y que suponen el mayor superávit de la balanza exterior, ya que exportan el 85 por ciento de la producción. Una industria que prevé las inversiones con décadas de adelanto y a la que, irracionalmente, el Gobierno de Pedro Sánchez acaba de poner fecha de caducidad, cuando ni siquiera es seguro que el PSOE exista para ese tiempo. Pero el daño está hecho, es grave y no puede justificarse en las buenas intenciones.
César Lumbreras también le pega un repaso a las ocurrencias del inquilino monclovita:
Sánchez dispara primero y después apunta. Lamento no recordar ahora a quien he escuchado esta afirmación, pero me parece muy acertada. A ella añado de mi cosecha que no es solo Pedro Sánchez, sino también el conjunto de su Gobierno, que parece haberse contagiado de la costumbre de su «mayor» de ir soltando ocurrencias. La última corresponde a Teresa Ribera, que ha vuelto a las andadas contra el diésel y los vehículos que se mueven con los derivados de petróleo.
El Mundo critica abiertamente la enésima prohibición del Gobierno socialista:
La petulancia del Gobierno de Pedro Sánchez ha llevado al Ministerio para la Transición Ecológica a preparar una ley que, como admiten fuentes ministeriales, va a imponer obligaciones por encima de lo esbozado en el Acuerdo de París para luchar contra el cambio climático. Solo en este afán de situarse un peldaño por encima de los expertos y de despreciar las voces de los sectores afectados se puede enmarcar el anuncio hecho público ayer: a partir de 2040 se prohibirá la matriculación y la venta, y en 2050 la conducción de todos los vehículos ligeros que emiten de forma directa dióxido de carbono. Es decir: los diésel y gasolina, por supuesto, pero también los híbridos e incluso los de gas. Aunque todavía se desconoce si estamos ante otro de los globos sonda del Ejecutivo, el carácter prohibitivo de la ley es una pésima noticia.
Juan Velarde es redactor de Periodista Digital @juanvelarde72