Se vienen acercando de forma peligrosa las fechas navideñas de 2020 en las que, marcado el Planeta por el azote del coronavirus, se pide a los ciudadanos un recatamiento nada habitual y, particularmente en España, una suerte de autogestión de los contagios.
Y eso es así por varias cuestiones; una de ellas, la falta de contundencia por parte de las autoridades a la hora de tomar decisiones; con vaivenes, contradicciones, cambios de parecer y demás patochadas.
Y otra, porque las disposiciones finales suponen una imposibilidad de control para las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Recuerden que el ministerio de Sanidad ha dispuesto una especie de baile de la sILLA para esta Nochebuena y Nochevieja, en la que no se permite el movimiento intercomunitario, a no ser que sea para cenar con un «allegado». Imagínense al policía en un control que tiene que cerciorar semejante barrabasada.
Así que los ciudadanos están hartos, y entonces los políticos se escudan en el no cumplimiento de las órdenes por parte de los primeros, y ellos a su vez descargan su ira en la incapacidad e incompetencia de los segundos.
Y entre medias están los grandes opinadores del país, como es el caso de Ana Rosa Quintana, que ya ha demostrado en diversas ocasiones que no concede ni una más al Gobierno de la Nación después de tantas…
Este 15 de diciembre de 2020, desde El programa de Ana Rosa, un golpe más en forma de aviso, para que se dejen de tanta acusación a los ciudadanos:
¿Sabéis lo que ocurre? Que al final los ciudadanos cuando vemos todo esto: el férreo control que quieren tener unos, la falta de organismos independientes que controlen desde fuera, las comunidades autónomas que se les ha dejado porque son los que dan las malas noticias… ¿Y al final qué decidimos los ciudadanos? ¡Que nosotros mismos nos tenemos que proteger! Y oiga, ¡que no nos echen la culpa a los ciudadanos de lo que pasa, ¡que bastante estamos haciendo!
«Illa está desbordado, o no se entera»
Apenas unas semanas atrás la propia presentadora sí había personalizado en la figura de Salvador Illa, como máximo responsable de la pandemia en España, solo por debajo de Sánchez, que ya sabemos que está solo para dar las noticias buenas…
El ministro de Sanidad o está desbordado, que es muy peligroso, que esté sobrepasado, o que no se entera, ¡o que nos engaña!
