(PD).- La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, considera que el barco abortista de la organización no gubernamental holandesa ‘Women on Waves’, que llegará el jueves a Valencia y partirá solo un día después hacia aguas internacionales para realizar el viernes los tres primeros abortos bajo el «pabellón jurídico holandés», es una «provocación» que produce «indignación».
En cada salida del barco se realizarán 7 abortos fuera del alcance de la legislación del país visitado. Barberá ha manifestado su desacuerdo ante la próxima llegada del barco. «Yo estoy en contra, yo, personalmente, de ese barco y de esa provocación», declaró, según informa cope.es.
La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, consideró hoy que el barco abortista de la organización no gubernamental holandesa ‘Women on Waves’, que llegará el jueves a Valencia y partirá solo un día después hacia aguas internacionales para realizar el viernes los tres primeros abortos bajo el «pabellón jurídico holandés», es una «provocación» que produce «indignación». Barberá, realizó estas declaraciones tras la reunión que mantuvo con miembros de la Federación Internacional de Vela.
«Creo que son provocaciones que nos llenan de indignación», respondió la alcaldesa, que mostró su oposición a esta iniciativa. «Yo estoy en contra, yo, personalmente, de ese barco y de esa provocación», manifestó en este sentido. Asimismo, la alcaldesa indicó que nos encontramos «en un mundo en el que cada institución tiene sus competencias asignadas» y donde «cada uno tiene que hacer lo que tiene que hacer».
El barco de la organización no gubernamental holandesa ‘Women on Waves», un velero de 18 metros, hará desde Valencia dos salidas hacia aguas internacionales para realizar abortos. Una el próximo viernes y otra el lunes 20 de octubre. Los abortos que pretende realizar serán «los primeros de la historia de España reciente al margen de la ley española», según los responsables de esta iniciativa, que destacan que no se infringirá la ley española, ya que se realizará bajo la ley de territorio holandés.
La iniciativa ha sido rechazada por organizaciones pro vida como la Federación Internacional de Asociaciones de Médicos Católicos, cuyo presidente, José María Simón señaló que esta iniciativa es parte de lo que denomina «la industria del aborto», un «mercado» que, a su juicio, acabará siendo «como el tráfico de esclavos: barcos, dinero y poca transparencia» y la plataforma HazteOir, quienes consideran que la idea está financiada por «la industria del aborto» y busca sólo «delinquir» para «hacer negocio». El Presidente de HazteOir, Ignacio Arsuaga, es además promotor de la iniciativa Derecho a Vivir (DAV), un comité de expertos que trabajará en paralelo a la comisión gubernamental que estudia la creación de una nueva ley del aborto, para defender «el derecho a vivir y a ser madre».
Arsuaga afirmó que el barco del aborto ha sido una idea financiada por «los empresarios del aborto» con la que buscan «presionar al Gobierno para que apruebe una ley del aborto libre» y poder pasar «de los 100.000 abortos que se cometen cada año en España hasta 200.000 en poco tiempo».
Ante esta situación, el promotor de DAV pidió a la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, que impidiera al barco el acceso al puerto y el acceso al mismo «de cualquier mujer embarazada que no se encuentre en las situaciones de despenalización contempladas por la legislación española».
