El secretario general del Partido Regionalista de Cantabria (PRC) y ex presidente del Gobierno de Cantabria, Miguel Angel Revilla, ha clamado este domingo en la localidad palentina de Monzón de Campos que «sólo necesita el apoyo de la gente» para «no parar hasta el último día de su vida» de luchar por la llegada del AVE a Cantabria.
Un «cheque» firmado que Revilla ha reivindicado ante las más de 2.000 personas que se han movilizado para dar al líder regionalista «la inyección de moral» que necesita, ha dicho, para demostrar que «el simpático de las anchoas» se puede convertir en «un peligro» si no llega a la capital cántabra «la clave» para su «futuro desarrollo».
Así lo ha señalado Revilla ante los cántabros y castellano- leoneses que han acudido a la cita por la «capacidad de movilización» del dirigente el PRC, quien ha reiterado que no va a «tirar la toalla» ni permitir «la vergüenza» de que no se cumpla el compromiso respecto al que considera el tren de alta velocidad «más rentable» del norte de España.
Y es que, en su opinión, si el AVE no llega a Cantabria, España «no merece llamarse» así, y le darían «ganas de darse de baja de este país», ha dicho Revilla.
El ex presidente regional ha reiterado que el AVE a Cantabria es un documento «firmado», que tendrán que cumplir «los que están» en el Gobierno central «o los que vengan», porque la alta velocidad para la comunidad autónoma «no es un capricho», sino «el futuro», además de una infraestructura «justa».
En este sentido, ha insistido en que sería «un escándalo» que el AVE, que ya está llegando a Galicia, Asturias y el País Vasco, «dejase en medio a Cantabria Infinita».
«No vais a quitarme el AVE de ninguna manera», porque sino «cuidado conmigo», ha advertido el líder regionalista, que ha añadido que «sólo» pide lo que tienen los demás para el «futuro desarrollo» de Cantabria; un desarrollo que pasa por llegar a Madrid a través de alta velocidad, y que tendrá que licitar «el que está ahora» o «el que venga».
Al respecto, ha recordado las críticas al PRC realizadas por el actual presidente de Cantabria, Ignacio Diego, del PP, mientras estaba en la oposición, ya que consideraba que los regionalistas «no luchaban» para que llegase la alta velocidad. Sin embargo, ahora Diego «no le quiere cargar con el muerto» al PP porque «posiblemente» su presidente, Mariano Rajoy, llegue al Gobierno central tras las elecciones de noviembre.
