El político aprovechó un acto de niños con los Reyes Mágicos

Ussía machaca a Revilla poniéndole en su sitio por atacar al Emérito

"Sus orígenes políticos son memoria de la facción más dura de la Falange. Ser falangista y monárquico es una contradicción", escribe Ussía

Alfonso Ussía y Miguel Ángel Revilla.
Alfonso Ussía y Miguel Ángel Revilla.

Pocos políticos evitan caer en la tentación de la propaganda constante. Uno de los que vive en un permanente spot electoral es el presidente de Cantabria Miguel Ángel Revilla. El líder del PRC (Partido Regionalista de Cantabria) asistió a un evento con varios niños junto a los Reyes Magos y aprovechando que el Pisuerga pasaba por Valladolid o, mejor dicho los Reyes de Oriente por Cantabria, Revilla atizó al Rey Juan Carlos.

Este acto no ha pasado desapercibido para Alfonso Ussía que en su columna del 2 de enero de 2023 en El Debate y le dejó las cosas clara al líder cántabro. Ussía se indignó al recordar que Revilla «aprovechó la ocasión para arremeter sin piedad ni respeto contra el Rey Juan Carlos, de quien tanto presumía anteayer de ser su amigo».

Para el creador del marqués de Sotoancho, el político regionalista «se equivocó de acto, de público y de intenciones«. Para Ussía la actitud del político tiene un trasfondo que tiene que ver con su pasado ideológico:

Revilla no tiene la obligación de ser monárquico. Sus orígenes políticos son memoria de la facción más dura de la Falange. Ser falangista y monárquico es una contradicción. Para compaginar las dos lealtades es necesario poseer el talento de Agustín de Foxá.

Miguel Ángel Revilla en 1973 fue Delegado Comarcal del Sindicato Vertical de la comarca de Torrelavega en la entonces provincia de Santander, parte de Castilla La Vieja. Fue este su primer contacto con la política y el inicio de una carrera que retomó en 1978 con su lucha por conseguir que la provincia de Santander fuera autonomía propia. Algo que, finalmente, consiguió en 1983 tras la oposición de su partido a formar parte de lo que luego sería la comunidad autónoma de Castilla y León.

«Aprovechar un encuentro de los niños con los Reyes Magos, para insultar y vejar a un Rey exiliado injustamente por el Gobierno social-comunista que no hizo otra cosa que tratarlo bien, con cercanía y el máximo respeto, es consecuencia de dos opciones. O Revilla es un grosero que se aprovecha de la indefensión de quien nos trajo a los españoles la libertad, la Constitución, los derechos humanos y la democracia, o Revilla no midió aquel día su capacidad de metabolizar el orujo. Prefiero elegir la segunda posibilidad», remata Ussía sobre el último acto de propaganda y oportunismo político del infatigable Miguel Ángel Revilla, al que lo mismo le sirve machacar al Rey Emérito que pasearse por los plató con una lata de anchoas.

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