Nueva demostración del rotundo fracaso de la política internacional del Gobierno de Pedro Sánchez.
Argelia se cobró su ‘vendetta’ por el reconocimiento del plan marroquí de autonomía del Sáhara por parte del Gobierno PSOE-Podemos.
Evidentemente enfadado por la decisión del líder del PSOE, el presidente de Argelia, Abdelmayid Tebune, anunció la suspensión «inmediata» del tratado de amistad suscrito con España hace casi dos décadas como represalia por su «injustificado» apoyo al citado plan de autonomía de Marruecos sobre el Sáhara Occidental.
Abdelmayid Tebune, ya había lanzado, recientemente, una dura crítica al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, al que acusó de incumplir la legalidad internacional al aceptar el plan de autonomía marroquí sobre el Sáhara Occidental, que anula las pretensiones de autodeterminación del pueblo saharaui.
Antes había matizado que las relaciones con el Estado español son «fuertes y firmes» y que cumplirá con sus compromisos de gas «cualquiera que sean las circunstancias». Pero todo tiene un límite y este miércoles 8 de junio Tebune ha dado por roto el tratado de amistad con España.
«Lo que ha hecho España es inaceptable, éticamente e históricamente», zanjó Tebune en una entrevista concedida a la televisión pública argelina el 24 de abril, en la que recordó al Gobierno español que «su responsabilidad perdura en el Sáhara Occidental ante la legalidad internacional».
Las autoridades argelinas recriminan a las españolas la campaña emprendida para tratar de argumentar un giro político que, según han esgrimido, suponen una «violación de las obligaciones jurídica, moral y política» de la que sigue siendo «potencia administradora» del Sáhara Occidental.
Argel ha afeado, nuevamente, el respaldo del Ejecutivo de Pedro Sánchez a una «fórmula ilegal e ilegítima» como es la autonomía planteada desde Rabat, que plantea una política colonial de «hechos consumados» mediante «argumentos falaces», según el comunicado recogido por la agencia de noticias oficial APS.