Negro se le está poniendo el horizonte penal al comisario (Pozas, el exvicedircom de Sánchez, dio el ‘pendrive’ de Podemos a Villarejo, porque el comisario era ‘el puto amo’).
Agentes de Asuntos Internos de la Policía Nacional, encargados de las pesquisas contra el comisario Pepe Villarejo, en prisión preventiva desde hace año y medio, detuvieron este miércoles 8 d emayo de 2019 a Adrián de la Joya aprovechando un viaje improvisado y exprés a España por motivos familiares, pues tiene su residencia habitual en Suiza (El comisario Villarejo confiesa al juez que Podemos le pidió desbloquear en un país africano una gran suma de dinero chavista).
Tanto De la Joya como otros cuatro detenidos por orden de Anticorrupción -el empresario naviero Ángel Pérez-Maura, su hermano Álvaro Pérez Maura, Francisco Javier Soucherion y Enrique Maestre- están investigados por el pago de una comisión de 30 millones de dólares a las autoridades guatemaltecas para conseguir la adjudicación de un contrato de construcción y explotación de una terminal privada de contenedores en Puerto Quetzal. Imputaciones que el entorno de De la Joya niega rotundamente (Villarejo señala a Alejandro Betancourt, dueño de Hawkers: lo vincula con pagos secretos a Podemos).
Según la Fiscalía, dicha comisión se habría pagado entre los años 2012 y 2015 al Presidente y la Vicepresidenta de la República de Guatemala para que la beneficiaria del contrato fuera la mercantil Grup Maritim Terminal de Contenedores de Barcelona S.L. a través de su filial en Guatemala Terminal de Contenedores Quetzal S.A, según recogen Gonzalo Araluce y Carmen Lucas-Torres en ‘El Español’.
La Fiscalía también investiga el pago de 10 millones de euros por parte del empresario Ángel Pérez-Maura al comisario Villarejo para que evitara su extradición a Guatemala, donde era reclamado por las autoridades judiciales de dicho país. Villarejo habría presumido de sus relaciones con miembros de la Audiencia Nacional, tribunal que decidía la extradición, para pedir a Pérez-Maura dicha cantidad.
La pieza PIT está todavía plagada de incógnitas. La principal se centra en esos 10 millones de euros. ¿Cómo se conocieron Pérez-Maura y Villarejo? ¿Se llegó a pagar esa cantidad de dinero al excomisario? ¿De dónde sale esa cifra? ¿Qué papel atribuye la Fiscalía a Adrián de la Joya en todo este entramado? (‘La Gran Comilona: le dicen a la ministro Delgado que Villarejo montó un burdel de lujo para sacar información y le parece normal)
De antemano, las certezas. Las autoridades guatemaltecas solicitaron la extradición de Pérez-Maura. Querían juzgarlo por la adjudicación de las obras a la empresa Contenedores Quetzal S.A, matriz de Grup Maritim Terminal de Contenedores de Barcelona S.L., vinculada al empresario español. La Audiencia Nacional, no obstante, denegó su extradición.
Algunas informaciones apuntaban a supuestos movimientos de Dolores Delgado en el procedimiento. Pero Anticorrupción ha dejado clara su postura (‘La comilona del Rianxo’: momentos gore en el festín de la ministra con Villarejo):
«La investigación no atañe a la actual Ministra de Justicia en funciones, Fiscal de la Audiencia Nacional en aquellos momentos».
La amistad entre Villarejo y De la Joya
La relación entre el también exagente secreto del Estado José Manuel Villarejo y el empresario De la Joya es conocida desde hace tiempo. De la Joya estuvo casado con Eva Fernández-Longoria, hija del exembajador español en Egipto Carlos Fernández-Longoria.
Gracias a ese matrimonio y a las relaciones de su esposa entró en contacto con algunos de los empresarios de la conocida como Jet Set marbellí y madrileña. Un grupo selecto de personas muy bien relacionadas nacional e internacionalmente y con alto nivel adquisitivo, como el traficante de armas Monzer Al Kassar, amigo de ambos.
Precisamente De la Joya convirtió sus relaciones personales en su fuente de ingresos. Se ha dedicado durante décadas a poner en común a personas con intereses económicos y a cobrar un success fee o comisión de éxito del negocio resultante. Villarejo, que también basaba su actividad en su amplia agenda, se convirtió en uno de sus confidentes y amigo interesado.
La relación entre ambos era estrecha, tal y como reflejan los informes de la Policía Nacional en el caso conocido con el nombre del Pequeño Nicolás. De acuerdo a las pesquisas de los agentes, el excomisario y el empresario se llamaron decenas de veces tras explotar el caso.
De la Joya ha acabado investigado en otros casos de corrupción, como el caso Lezo, presuntamente por haber sido el receptor de una comisión en una cuenta Suiza de 1,4 millones de euros de una filial de OHL para entregarla posteriormente a Ildefonso de Miguel, hombre de confianza de Ignacio González en en Canal de Isabel II.
Precisamente la residencia del empresario (y de sus sociedades) en Suiza le habrían convertido en una amistad ventajosa con la que contar en caso de buscar un lugar donde ocultar fondos. Según un informe incorporado al caso Lezo recientemente, Hacienda rastrea los movimientos del empresario para sacar de cuentas suizas hasta 12 millones de euros de origen desconocido.
Hasta ahora, aunque conocida su amistad con Villarejo, De la Joya no había aparecido en la amplia investigación que se sigue contra el comisario jubilado en la Audiencia Nacional. La Fiscalía investiga ahora si tuvo un papel de enlace entre Villarejo, Pérez-Maura y las autoridades guatemaltecas para conseguir las presuntas comisiones de las que su defensa le desvincula.