Mabel Redondo – Entre Bambalinas – Amores y desamores.


MADRID, 19 (OTR/PRESS)

Belén Rueda tiene el corazón contento, el pasado septiembre conocía a un atractivo empresario francés con quien ha comenzado una relación que de momento va «viento en popa». El vive en París pero para el amor no hay distancias y la pareja sigue al «pie de la letra» un calendario de viajes que les permite encontrarse y vivir su historia a su manera.

Hace ya un lustro que Belén se separó del productor televisivo Daniel Ecija, y desde entonces no ha cesado en su intento por rehacer su vida con una pareja.

Javier Bardem, Jose Luís García Perez y Eduard Bonilla han estado muy ligados al corazón de esta alicantina que en los últimos años se ha hecho un hueco en la gran pantalla.

Belén acudió puntual a su cita con los medios para presentar dos nuevos productos de la marca de lácteos «Puleva» a la que representa desde hace una década. A sus 44 años está contenta y se siente plena, este verano se lo pasará trabajando en Argentina, concretamente en el rodaje de una nueva película: «el director es argentino, estoy muy ilusionada con esta producción pero cuando me sale trabajo fuera me lo pienso por mis hijas, tal vez me lleve a las niñas unos días, pero aún no está claro porque también tienen que pasar vacaciones con su padre».

De momento su estreno más inmediato es «El Mal Ajeno» dirigida por el novel Oscar Santos y producida por Alejandro Amenabar, Belén es coprotagonista junto a Eduardo Noriega: «en esta peli soy una mujer con muchos problemas que resurge entre las cenizas» la actriz me aseguró que estaría orgullosa de ser considerada como «chica Amenabar», «eso me encantaría» dijo con una enorme sonrisa.

Belén es esquiva cuando se le pregunta por su novio, siempre ha sido muy celosa de su intimidad, pero no lo puede evitar, y aunque sus labios no cuenten detalles de su relación con el francés, el brillo de sus ojillos la delatan como mujer enamorada, ¡felicidades y que lo disfrutes*!

Y mientras que unos se enamoran otros se desenamoran e incluso llegan a repudiarse. Es el caso de Lidia Bosch y Alberto Martín que se preparan para verse las caras en los juzgados el próximo viernes 22, una vista importantísima en la que se dictaminarán las medidas cautelares a seguir; Por una parte se tratará la custodia de los dos hijos de seis años fruto del matrimonio y por otro lado se determinará la cuantía de la pensión compensatoria. Es esta una de las separaciones más escandalosas de los últimos tiempos por esos tintes de supuestos «abusos sexuales» a una menor y por ese velo oscuro que se teje entorno a los dos protagonistas de la ruptura.

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA

Lo más leído