La Marea de Pérez Henares

En el PSOE no rechista nadie

No rechistará nadie. En el PSOE no rechista nadie ni cuando se van. Se van a la chita callando y solo mucho después, como Leguina o Ibarra, cuando ya a nadie importa ni importancia alguna tiene, nos dicen lo que piensan. Lo que debieron decir cuando importaba, cuando tenían poder e influencia para que las cosas fueran de otra manera.En el PSOE la patria es el partido y la ideología hegemónica mantenerse en el poder. Lo demás es accesorio. Por ello jamás se les oirá denunciar en público de lo que reniegan en privado.

Callarán delante de un Estatuto Catalán que rompe con las cuadernas principales de los principios de igualdad socialista, escurrirán el bulto mientras puedan y votarán cuando haya que votar que una niña de 16 años puede abortar a espaldas de sus padres aunque se rasguen las vestiduras en los cenáculos íntimos, el primero el presidente del Congreso, el católico Bono y ahora, aclamarán enfebrecidos al caudillo Zapatero al grito que ya tienen patentado como seña de identidad parlamentaria :”Torero, torero”.

Pero es que además pocos en conciencia, contados entre los dirigentes apenas un puñado, piensan de diferente manera a del líder socialista. El es su icono, su único referente, su oráculo, la medida de todas las certezas , la definitiva verdad en cada momento por muy cambiante que esta sea. Pero es que además es el exclusivo repartidor de gorras, de todas las gorras, desde las de asesor a las de ministro.

En el PSOE surgen generaciones de clones zapateriles , Bibis y Pajines, con puñitos de diseño, y triunfan los bautistas de cabeza reclinada hacia el generoso pecho del señor , sean ministros o periodistas de cámara. Ellos gozarán de los manjares del sillón o de la TDT de pago.

¿Y las bases? ¿El pueblo llano socialista? . Pues la parroquia sentimental que en España, sin cultura política ni democrática tras 40 años de dictadura, confunde ideología con hinchada futbolística se alimenta del odio al contrario para mantener la adhesión inquebrantable por más que haya de comulgar con ruedas de molino. Sean estas lingüísticas en Cataluña donde ellos dan su voto mayoritario y decisivo para que prohíban su lengua materna y para que los ricos tengan más derechos porque han de pagar más impuestos, sean estas raudales de parados a los que el santón se aparece no como responsable en buena parte de sus penas sino como único amparo en sus desdichas.

No rechistará pues nadie en el PSOE. Porque todo el partido socialista es hoy exclusivamente el presidente Zapatero. Nadie ha acumulado tal poder ni carecido de cualquier contrapeso. Hasta Felipe tuvo a Guerra. A Zapatero sólo le rodea un coro de palmeros. Está solo en su triunfo y pedestal. Pero en ese endiosamiento es donde se ciegan los mortales que olvidan serlo. Es el principio de su perdición. Y cuando caen de la pirámide los imperios mayas se hacen añicos en un tumulto de confusión y caos al desplomarse el rey y sumo sacerdote.

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Autor

Antonio Pérez Henares

Ejerce el periodismo desde los 18 años, cuando se incorporó al diario Pueblo. Ha trabajado después en publicaciones como Mundo Obrero, Tiempo, El Globo o medios radiofónicos como la cadena SER. En 1989 entró al equipo directivo del semanario Tribuna, del que fue director entre 1996 y 1999. De 2000 a 2007 coordinó las ediciones especiales del diario La Razón, de donde pasó al grupo Negocio, que dirigió hasta enero de 2012. Tras ello pasó a ocupar el puesto de director de publicaciones de PROMECAL, editora de más de una docena de periódicos autonómicos de Castilla y León y Castilla-La Mancha.

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