Los definió en una sola frase: «Son ustedes un desastre».
El portavoz de VOX en el Congreso de los Diputados, Iván Espinosa de los Monteros, ha vuelto a dejar en evidencia a la vicepresidenta primera y ministra de Economía y Transformación Digital, Nadia Calviño.
Esta vez, el del partido de Santiago Abascal salió en defensa del sector privado y de los empresarios que son maltratados un día sí y otro también por el Gobierno socialcomunista.
«España es un gran país. Con sus debilidades, fortalezas y oportunidades. Sin dudas, una de las grandes fortalezas de nuestro país son sus trabajadores, sus autónomos, sus comerciantes, sus pequeños y grandes empresas, las que generan empleo».
Espinosa pasó a nombrar los aspectos negativos y encontró el principal: la clase política. «Sin duda, entre las grandes debilidades están los gobernantes que rara vez han cotizado un solo día de su vida en el sector privado, que rara vez han emprendido nada».
Lo mejor fue cuando retrató a los miembros de la bancada de izquierda por no haber trabajado nunca en el sector privado:
«Cuando uno mira este mismo Gobierno, uno ve político, una funcionaria, político, político, funcionario, político, funcionario, político, político, funcionario, estuvo un día en un despacho de abogados, político… mejor no seguimos».
Y es esta falta de vida laboral en empresas de capital privado lo que redunda en el desprecio de los miembros del PSOE y Podemos por los empresarios. Además, le sacó en cara las cifras que dejan en evidencia la pésima gestión económica, que nos ha dejado a la cola de Europa y siendo los únicos de la región que no recuperamos el nivel prepandemia.
«Ustedes desconocen el sector privado que atacan y encima gestionan de forma realmente triste lo público. Están alcanzando cifras que no se conocían nunca. Record de paro, a pesar de las trampas que hace usted y su ministra de Trabajo, considerando a los fijos discontinuos como activos cuando están realmente parados. Con 2,7 millones de contratación pública, récord absoluto. Así es como ustedes atajan el problema del paro. Con récord absoluto de recaudación a pesar de que la ministra de Hacienda dijo que jamás subirían los impuestos. Con récord absoluto de inflación. No sé dónde compra usted, pero en el resto de España los alimentos han subido un 15,4% la cesta de la compra en lo que va de año, cifras de esta mañana. Y la mayor renta disponible de occidente».
Lo más insultante es que ustedes dilapidan los recursos públicos para luego atacar al sector privado que es el sector productivo que saca a delante este país. El sector que genera empleo, riqueza, que paga impuestos, que cotiza la Seguridad Social, que hace que ustedes luego puedan dilapidar el dinero».
Acto seguido, pasó a enumerar los ataques por parte de los principales rostros del Ejecutivo de PSOE-Podemos. El presidente Pedro Sánchez, insultándolos y atacándolos con lo de empresarios del puro que hacen conspiraciones contra el Gobierno. La ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, diciendo que los agricultores hacen trabajar a las personas en modo esclavitud. La ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico de España, Teresa Ribera atacando al sector automotriz y a las eléctricas. El ministro de Consumo, Alberto Garzón atacando al turismo y a la ganadería.
Calviño tuvo que conceder que España es un gran país pero luego volvió a soltar su retahíla de falsedades y a pintar un país donde todo funciona bien, no se rebajan las penas a los delincuentes sexuales, y el dinero alcanza para cada vez más cosas.
Además, al sentirse ‘insultada’ por lo de no haber cotizado en el sector privado, aseguró que los funcionarios son los médicos, los educadores, los bomberos, como si ellos tuvieran escaños en el Hemiciclo.
Luego de la patética respuesta de Calviño, Espinosa le hizo una pregunta que la socialista no pudo responder por miedo a Podemos, su socio de Gobierno:
«La gran diferencia señora ministra es que nosotros no atacamos a los funcionarios como ustedes sí lo hacen con el sector privado. La ministra Belarra les ha llamado usureros, codiciosos y avariciosos. ¿Usted condena estas declaraciones de su compañera de gabinete?»
Calviño, echó balones fuera para evitar profundizar el cisma con los podemitas que ha empeorado con las consecuencias del Sí es sí o la aprobación de la Ley de Bienestar Animal.
