El consejero ha defendido que las cuentas de Castilla-La Mancha para el año próximo son muestra de que los esfuerzos que se han realizado estos dos años
El consejero de Hacienda de Castilla-La Mancha, Arturo Romaní, ha asegurado que el Ejecutivo castellano-manchego no ve «nada solvente o sólido» en la enmienda a la totalidad que el PSOE ha presentado a los presupuestos regionales del año próximo y que se debatirá la semana que vienen en las Cortes.
En una entrevista en Radio Nacional de España, recogida por Europa Press, el consejero ha lamentado que la enmienda a la totalidad que han presentado los socialistas se base en el ‘no’ a «todo», así como que el PSOE no haya presentado alternativas.
El consejero ha defendido que las cuentas de Castilla-La Mancha para el año próximo son muestra de que los esfuerzos que se han realizado estos dos años «han merecido la pena» y la prueba, según ha añadido, es que «los grandes ajustes han terminado».
En este sentido, el titular de Hacienda de Castilla-La Mancha ha explicado que este año el presupuesto contiene un ajuste de un 1% en el techo de gasto, unos 60 millones de euros. «Ya vemos un punto de inflexión», ha agregado.
PAGO A PROVEEDORES
Preguntado por el pago a proveedores, Romaní ha indicado que todavía quedan por resolver 278 millones de euros del primer tramo, que ya se tramitó este verano y se está a espera de pago por parte del Ministerio, y 713 millones del segundo tramo que se ha abierto ahora dirigido a facturas.
«Nos quedarán alrededor de 200 millones de euros que espero que seamos capaces de resolver», ha indicado el consejero, quien ha insistido en que la Junta piensa que puede acabar el año pagando la deuda que tiene con sus proveedores y comenzar 2014 pagando en plazo.
A juicio de Romaní, se trata de un escenario «bastante satisfactorio» que «no hubiera sido posible» si no se hubieran ajustado las cuentas, estuvieran equilibradas y se cumpliera con el objetivo del déficit desde 2012.
FINANCIACIÓN AUTONÓMICA
Por último, respecto a la negociación sobre la financiación autonómica, el consejero ha subrayado que va a ser un debate «muy interesante e intenso» en el que el punto de partido serán las balanzas fiscales que se publiquen a finales de año.
«Va a ser una negociación muy dura y para nosotros la clave es garantizar la igualdad de todos los españoles en el acceso a las prestaciones que las comunidades autónomas tienen ahora mismo. Que se mire a las personas y no a los territorios», ha concluido.
