Steve Jobs fue el cerebro capaz de cambiar la forma como se concebían los teléfonos móviles.
El anuncio lo hizo el 9 de enero de 2007, justo hace trece años y además de demostrar la capacidad insuperable de innovación de su equipo, demostró cómo se debe hacer una presentación histórica.
«Hoy vamos a hacer algo de historia (…) Presentamos tres productos revolucionarios: un iPod con controles táctiles, un teléfono móvil revolucionario y un dispositivo avanzado de conexión a Internet. No son tres dispositivos distintos, es uno solo y lo hemos llamado iPhone«, dijo Jobs.
Pero fiel a su estilo no escatimó en explicaciones -todas totalmente acertadas y es muy fácil decirlo a día de hoy- para aplastar a la competencia e introducir un nuevo diseño de teléfonos móviles, el mismo que permanece vigente este 9 de enero de 2020.
«El problema es que no son tan inteligentes y no son tan fáciles de usar… aquí hay 4 teléfonos móviles, Motorola Q, Blackberry, Palm Treo y Nokia E62, todos tienen este teclado aunque no lo necesites y tienen esas teclas de plástico pegados allí y aunque las aplicaciones cambien y ya no utilicen determinadas teclas, no los puedes cambiar». Dijo Jobs mientras el público disfrutaba cada palabra.
Así fue como el obstinado Jobs hundiría para siempre a compañías como Motorola, Nokia o Blackberry que nunca pudieron reponerse. Las que salieron posteriormente como Samsung o Huawei lo entendieron muy bien, simplemente copiaron el modelo del iPhone y aplicaron mejoras.