La Junta de CyL ¿promueve medidas para evitar abortos?

Por José María Arévalo

(Maternidad urbana. Acuarela de Pedro Barahona. 46 x 61.)

El pasado 1 de febrero publicaba la prensa una nueva acción de la Junta para fomentar la natalidad, el llamado “cheque bebé”: Los nacimientos y adopciones que se produzcan en Castilla y León desde el 1 de enero de este año vendrán, además de con el tradicional ‘pan debajo del brazo’, con una tarjeta de entre 500 y 2.500 euros para gastar en artículos para el neonato en los comercios de la Comunidad. Cuantía que se duplicará en el caso de que el menor presente algún tipo de discapacidad. El popular ‘cheque bebé’ o ‘Bono Nacimiento’, como lo ha llamado la Junta de Castilla y León, servirá para fomentar la natalidad en la región, apoyar a las familias con los gastos del recién nacido durante los primeros meses y, de paso, para fortalecer el sector comercial autonómico, donde será obligatorio gastar el importe de la ayuda. «Confirmamos el liderazgo de Castilla y León en el apoyo a las familias y a la natalidad», celebraba ayer el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, que, junto a la consejera de Familia, Isabel Blanco, presentó esta tarjeta, suministrada gracias a la colaboración de CaixaBank, y que se podrá solicitar  desde el 7 de febrero. Esta medida de fomento de la natalidad parece no presentar inconvenientes, como ocurrió con la  anterior para facilitar información a las embarazadas de la comunidad. Vamos a ver qué pasó.

Todavía quedan ecos de la polémica sobre las declaraciones del vicepresidente de la Junta de Castilla y León, García-Gallardo, de Vox, referidas a una serie de medidas que la Junta iba a tomar para facilitar la salud de las embarazadas, su salud mental, proporcionarles el latido fetal o ecografías 4D, medidas que en su opinión podían  colaborar a evitar abortos. Se ha cerrado negándolo todo por el presidente de la Junta, ante las presiones del gobierno central. Sin embargo Vox asegura que se mantiene el protocolo. En realidad se trataba de una campaña de Gallardo con polémica, de cara a las elecciones ya próximas, tanto de García-Gallardo como del PSOE e incluso del PP, una “serpiente de verano” o «bote de humo» sin apenas fundamento.

Sin embargo el obispo de Alicante -como reproducimos al final- ha planteado si no será al revés: ¿No será que ese día a día político “es un bote de humo para distraernos de lo esencial, como es el derecho a la vida de los inocentes?” Para mi que tiene toda la razón. Veamos lo ocurrido.

Declaraciones de García-Gallardo

Empezó con unas declaraciones de García-Gallardo defendiendo que los médicos puedan promover acciones «provida» entre las mujeres embarazadas, aunque ellas tendrán la última palabra y podrán decidir si las aceptan o no, declaraciones que se publicaban en todos los medios el pasado 13 de enero. En realidad se trataba de un protocolo de la Consejería de Sannidad -del P.P.- al que Gallardo ha tratado de dar mayor relevancia de la que tiene, para aparecer como defensor de la vida y ganar votos entre los católicos de cara a las próximas elecciones.

Y así el Mundo de Valladolid recogía que “la sanidad pública de Castilla y León incorporará un protocolo de derivación a los equipos de salud mental de mujeres embarazadas «que lo requieran», como fórmula para prevenir abortos, además de ofrecer una cuarta ecografía en el primer trimestre del embarazo para que los progenitores puedan «escuchar el latido del bebé» y una ecografía 4D antes de interrumpirlo. Un conjunto de medidas «provida» que presentó el vicepresidente de la Junta y líder de Vox, Juan García-Gallardo, desde la perspectiva de que, para el Gobierno de la Comunidad, «el derecho a la vida es prioritario». La idea inicial, tal y como explicó, es poner las medidas en marcha «inmediatamente» con el ofrecimiento de las mismas «de manera obligatoria» por parte del profesional sanitario, aunque a los padres y madres «no se les va a obligar a escuchar el latido del bebé» dado que «es voluntario» participar de estos programas.

No obstante, más tarde, fuentes de la Consejería de Sanidad en Castilla y León, cartera que dirige el PP, explicaron a este periódico que no hay novedad ninguna y que «el protocolo va a seguir igual». De esta forma, según estas mismas fuentes de la Consejería, «no se obligará a los médicos» a ofrecer una ecografía entre la sexta y la novena semana para que la embarazada escuche el latido fetal ni tampoco una ecografía 4D si no es por sospecha de alguna anomalía. Un extremo, el de la obligatoriedad, que había sido anunciado por el vicepresidente autonómico. «No va a haber ningún cambio en el protocolo», insisten.

El paquete de medidas anunciado por García-Gallardo también incluye la protección de la objeción de conciencia de los profesionales sanitarios que no quieran practicar abortos, y aseguró que «no se establecerán listas negras» de objetores. El número dos de la Junta detalló durante su intervención tras el Consejo de Gobierno que se trata de un acuerdo «negociado y consensuado» con la Consejería de Sanidad y que supone el desarrollo del acuerdo de Gobierno entre PP y Vox firmado el 10 de marzo del año pasado, concretamente en lo relativo a los puntos 12 y 13 para el apoyo a las familias y la promoción de la natalidad.

Decisión voluntaria de la mujer                                  

Tal y como explicó el vicepresidente, en la práctica, la entrada en vigor de estas medidas obligaría a los profesionales a «decirle a la mujer que tiene esas tres posibilidades» –atención psicosocial, latido fetal y ecografía 4D–, mientras que su uso o no será una decisión voluntaria de la mujer. Hecho, el de obligar a los sanitarios, que más tarde fue negado por fuentes de la Consejería de Sanidad a este periódico. «Se trata de que todas las mujeres que acudan por primera vez a una consulta en situación de embarazo tengan posibilidades para que puedan tomar, lo más informadas posible, cualquier decisión: la de seguir o la tragedia a nivel social, por la huella que deja a las mujeres, de abortar», apuntó”.

Así se han ido matizando las declaraciones de García-Gallardo en los sucesivos días, por ejemplo respecto a la segunda de las medidas, el protocolo de latido fetal y el registro cardíaco, algo «optativo y complementario» con las tres ecografías preceptivas que se realizan actualmente y que se llevaría a cabo entre las semanas seis y nueve de embarazo, a fin de permitir que «antes de cualquier decisión», puedan «escuchar el latido de su hijo».

Por lo que se refiere a las ecografías 4D, se trataría de una técnica ecográfica complementaria y no sustitutiva de los estudios ecográficos estandarizados del seguimiento del embarazo, que «puede aportar ventajas para la evaluación ecográfica de los profesionales», ya que «permite una mejor visualización del feto, así como una mejor valoración del corazón, permitiendo una detección más precoz de las cardiopatías congénitas».

Ola de críticas

Las declaraciones del vicepresidente de la Junta y líder de Vox, Juan García-Gallardo, se encontraron enseguida con una férrea crítica por parte de la oposición parlamentaria y miembros del Gobierno de España -les ha venido al pelo para desviar la atención de otros problemas y crear debate de cara a la próximas elecciones-, en la que se tergiversaban aquellas declaraciones, por ejemplo acusando esas medidas de coacción a las mujeres, cuando desde el primer momento Gallardo dijo que se trababa de medidas voluntarias para ellas. Así, el líder regional del PSOE, Luis Tudanca, arremetió contra las medidas, denunciando que pretenden «coaccionar» a las mujeres que deciden interrumpir su gestación y «dificultar» el ejercicio de este derecho. Aseguró así que se vuelve a producir un «ataque intolerable» a los derechos y libertades de las mujeres. «Es inaudito», dijo. «Lo terrible es que en Castilla y León hace mucho tiempo que el señor Mañueco nos ha metido en un túnel del tiempo, que vamos hacia atrás, que parece que volvemos a los tiempos del NO-DO», remató el socialista tras conocerse el contenido del plan anunciado por Juan García-Gallardo.

También el procurador de Cs, Francisco Igea, advirtió a la Junta de que «menoscabar» el derecho al aborto está tipificado por el Código Penal. «Ya está bien de este disparate que estamos viviendo en esta Comunidad», dijo. Desde el Ejecutivo Central, la ministra de Educación y portavoz del PSOE, Pilar Alegría, comparó con ‘El cuento de la criada’ las medidas anunciadas por la Junta, y lamentó que buscan «intimidar» a las mujeres. Por su parte, la ministra de Igualdad, Irene Montero, criticó que  «estas son las alianzas de Feijóo. Esto es el PP».

Sanidad admite que se aplicará el nuevo protocolo

Pero enseguida la prensa confirmaba que Sanidad, a cargo del P.P. (concretamente el consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez), admite que se aplicará el nuevo protocolo de medidas «provida» de VOX a partir del lunes en Castilla y León. El consejero de Sanidad aclaraba que las nuevas medidas «en ningún caso están dirigidas exclusivamente para mujeres que quieran abortar, sino para dar más protección a todas las mujeres embarazadas». Solo corregía al Vicepresidente en un punto: Vázquez indica que la aplicación del plan no será un «imperativo» para los sanitarios como anunció García Gallardo.

Y así, El Mundo del 14 de enero recogía que “la Consejería de Sanidad admite que el protocolo de medidas «provida», tal y como lo bautizó VOX, se aplicará a partir del lunes en Castilla y León. El consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez, deja claro a este periódico que comenzará a aplicarse «a partir del próximo lunes». Es decir, «de inmediato», como había dejado claro García-Gallardo ante los medios y en su twitter.

La sanidad se dedica a la vida, pero no a adoctrinar

Para su aplicación, en palabras del titular de la cartera de Sanidad de Castilla y León, «se emitirá una instrucción el mismo lunes desde la gerencia de Sanidad a los gerentes de los hospitales». Eso sí, Alejandro Vázquez matiza que no será un «imperativo» para los profesionales, como aseguraba García-Gallardo en su comparecencia tras el Consejo de Gobierno, sino que «recomienda» que informen de la cuatro medidas del protocolo «a todas las mujeres embarazadas y serán ellas las que decidan qué hacen». De hecho, este mismo viernes, el propio presidente de VOX, Santiago Abascal dejaba claro que «el objetivo no es obligar a los médicos a ninguna actuación, sino dar el derecho a las madres de poder escuchar el latido de la vida que llevan dentro».

Las medidas de este nuevo protocolo «en ningún caso están dirigidas exclusivamente para mujeres que quieran abortar, sino para dar más protección a todas las mujeres embarazadas, como se señala en el título del protocolo que habla del fomento de la natalidad y el apoyo a las familias», aclara Alejandro Vázquez en declaraciones a este medio, para quien el error está en quien lo ha ligado al aborto, algo que hacía Gallardo al afirmar que defendía que su presencia en el Gobierno de la Junta valdría la pena «si con ello se evita que un solo niño sea abortado». «Es para el fomento a la natalidad y el apoyo a las medidas, como otras nuevas medidas que habrá», matiza el Vázquez. Un protocolo que, analizando sus cuatro puntos, viene a cambiar el que existía.

La principal novedad radica en que todas ellas, la atención psicológica, escuchar el latido del feto y las ecografías 4D, se aplicarán, «siempre que la mujer quiera», en la semana 12, que es cuando se realiza la primera ecografía a las embarazadas. Es decir, en la primera visita que la mujer realiza al ginecólogo, cuando se lleva a cabo la primera ecografía, se le informará de la garantía de asistencia  por psicólogos clínicos, del protocolo del latido fetal, es decir que puede escuchar  el latido del feto y la posibilidad de la realización de una ecografía 4D desde la semana  12, que ahora sólo se hacía en la semana 33 y siempre bajo prescripción médica.

Asistencia psicológica

La primera de las medidas de este nuevo protocolo, según detalla la nota de prensa, remitida fuera de los acuerdos del Consejo de Gobierno, a la que se remite el consejero de Sanidad, pasa por «garantizar a la madre gestante el acceso a una atención psicosocial específica, en la esfera emocional, mediante el acceso a un psicólogo clínico de Sacyl». Esto ya se estaba haciendo con todas las embarazadas que así lo pedían, pero ahora se agiliza, «se hará sin pasar por la Atención Primaria», explica Alejandro Vázquez.

Hasta ahora, cuando la mujer solicitaba este servicio a su ginecólogo, éste tenía que derivarla de nuevo a Atención Primaria y, de ahí, al servicio de psicología clínica. Ahora, se suprime este paso de la Atención Primaria y es el ginecólogo quien la deriva a psicología. Con esto se les da atención preferente a las mujeres embarazadas.

Latido fetal

La segunda medida se centrará en la elaboración e implantación de un protocolo de latido fetal dentro de la atención programada en el primer trimestre. Es decir, también en esa primera consulta, a las 12 semanas de gestación se le ofrecera «a todas las madres», insiste  el consejero de Sanidad, el que puedan escuchar el latido del corazón del feto. Latido fetal que puede identificarse en un estudio ecográfico a partir de la sexta semana de embarazo utilizando la técnica de Doppler.

«Si bien la recomendación de la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO) es la realización de tres ecografías durante el embarazo en las semanas 12, 20 y 33 para el correcto control y seguimiento de la gestación, en situaciones específicas esta exploración puede llevarse a cabo con mayor frecuencia, incluyendo una primera ecografía entre la semana 6 y 9 del embarazo para el primer registro del latido cardiaco», detalla el protocolo de Sanidad.

Hasta ahora, el poder escuchar el latido, no se ofrecía a todas las mujeres embarazadas en esa primera ecografía de las doce semanas, con este nuevo protocolo de medidas, sí. De nuevo, como en todas la medidas, serán ellas quienes decidan si quieren oírlo o no.

Ecografías 4D

Las dos medidas anteriores comenzarán aplicarse a partir del lunes, en cuanto se remita la instrucción a todos los gerentes de hospitales, no así la realización de ecografías 4D para todas las embarazadas, que así lo quieran desde la semana 12. La razón de su retraso en la aplicación es que no todos los hospitales de la Comunidad cuentan el ecógrafo para poder realizarlas. En concreto, los hospitales de Ávila y Segovia carecen de este equipo sanitario. «Comenzaremos aplicarla en todos los hospitales en cuanto tengamos equipos en todos», indica Alejandro Vázquez.

El control y seguimiento de un embarazo se lleva a cabo, entre otros, a través de la realización de tres ecografías regladas bajo un protocolo estandarizado, permitiendo así una adecuada valoración del feto. Se incluye el estudio de la edad gestacional, ritmo de crecimiento, formación de todos sus órganos, así como estado de la placenta y cantidad de líquido amniótico.

En la actualidad, existe la posibilidad de realizar la denominada ecografía 4D, eso sí sólo se hacía a partir de la semana 33 y siempre bajo prescripción del ginecólogo. La técnica 4D «permite la reconstrucción tridimensional de las imágenes habituales 2D del feto, al mismo tiempo que registra su movimiento, pudiendo así mostrar en un vídeo en tiempo real una imagen del bebé con sus rasgos y gestos faciales, manos, dedos, pies y resto del cuerpo, todas ellas perfectamente identificables y reconocibles para la madre y la familia, favoreciendo así su implicación emocional». Alejandro Vázque explica que en la semana 12 de embarazo, la ecografía 4D sirve de poco porque no va aportar grandes cosas, que comienzan a ser más tangibles en la semana 20 y mucho más, claro está, en la 33. En cualquier caso, «se ofrecerá a todas las mujeres embarazadas que así lo quieran el poder realizarla desde la semana 12», destaca.

Objeción de conciencia

Respeto y protección a los médicos que se acojan a la objeción de conciencia para no practicar abortos. Una medida que, según el nuevo protocolo, «se centrará en velar por que se respete el ejercicio del derecho fundamental a la objeción de conciencia de aquellos profesionales que participen en la prestación de la interrupción voluntario del embarazo (IVE)».

En este nuevo protocolo se deja claro que el rechazo o la negativa a realizar la intervención de interrupción del embarazo por razones de conciencia «es una decisión siempre individual del personal sanitario directamente implicado en la realización de la interrupción voluntaria del embarazo, que debe manifestarse anticipadamente y por escrito. En todo caso, los profesionales sanitarios dispensarán tratamiento y atención médica adecuados a las mujeres que lo precisen antes y después de haberse sometido a una intervención de interrupción del embarazo.

El consejero de Sanidad deja claro que «no existen listas negras», algo que ya había insistido el propio Gallardo en la rueda de prensa del Consejo de Gobierno.”

Matices y polémica

Al final todas estas declaraciones han sido comentadas y en buena parte tergiversadas, y no solo por los socialistas, sino que provocaban también la reacción negativa (a la defensiva) de Génova, a través de su recién nombrado portavoz nacional electoral, Borja Sémper, lo que aparentaba un conato de encontronazo entre PP y VOX.

Mientras el Gobierno central remitía una advertencia a la Junta de Castilla y León de que debía cumplir la normativa legal sobre el aborto, Borja Sémper avisaba ya a VOX, tras sus “medidas antiaborto”, que su formación «no va a tragar con cualquier cosa» y que expresará su rechazo con las medidas con las que no esté de acuerdo y se quieran «imponer. Son perfectamente compatibles las políticas de fomento de la natalidad con una política clara de respeto a la libertad de la mujer», aseguraba Sémper en una entrevista en Antena 3 recogida por Europa Press. Sémper dejaba claro que «el Gobierno o el PP en este caso cuando no esté de acuerdo lo va decir y va a rectificar las políticas que otros quieran imponer y consideremos que son equivocadas», finalizaba.

El Gobierno central amenaza

No tengo claro si la postura crítica del P.P. era anterior o posterior (supongo que esto último, asustadillos) a las críticas del Gobierno central, que amenazaba el mismo día 14 de enero con llevar a la Junta ante los tribunales si materializa un plan que Gallardo insiste en que se cumplirá y pide al PP que no le «tiemble el pulso». Y siguiendo la ceremonia de la confusión, los consejeros del PP se desmarcaban del plan antiabortos de Vox, Ortega-Smith acusaba al PP de «no cumplir con lo que prometen» y Gallardo insistía en que las medidas antiaborto están consensuadas.

Quizá el ‘quid’ de la polémica estaba en las palabras verbalizadas por García-Gallardo de que «Los sanitarios estarán obligados a ofrecer estas medidas, aunque su aceptación será voluntaria».

«No será obligatorio» que los sanitarios ofrezcan estas opciones, dijo por su parte el consejero de la Presidencia, Jesús Julio Carnero. «En absoluto se les obligará», y remarcó la «absoluta voluntariedad» para «embarazadas y profesionales» a la hora de aceptar u ofrecer esas medidas. Menos tajante fue la consejera de Familia e Igualdad, Isabel Blanco, que se limitó a segurar que las medidas  se ofertarán «a todas las embarazadas», e indicó que serán ellas, «desde su libertad», las que elegirán «si las quieren utilizar o no».

Mientras, Juan García-Gallardo desafió a quien crea que las medidas del protocolo antiaborto no son legales y que pueden suponer una coacción para las mujeres embarazadas que tengan decidido abortar a que acuda a la justicia y lo denuncie, porque si van contra el Código Penal «lo decidirá un juez». «Se van a aplicar inmediatamente», insistió el vicepresidente, que volvió a ratificar que las medidas están consensuadas y negociadas «obviamente» con la Consejería de Sanidad.

El líder de Vox, Santiago Abascal, no ha dudado en respaldar públicamente las medidas «provida» anunciadas por el vicepresidente regional, aunque evitó ahondar en la diferencia de posturas entre el PP y Vox. «No voy a añadir ningún debate más que pueda complicar la buena relación entre el PP y Vox en Castilla y León», señaló Abascal, que aprovechó para insistir en que su formación política se mantendrá «firme» en su defensa. Pero lo que está claro es que Vox está en contra del aborto y el PP no, al menos no claramente.

Los ministros socialistas del Gobierno, el PSOE y la formación socialista en Castilla y León no escatimaron sus ataques frente al «hostigamiento» y la «limitación de los derechos» de las mujeres en Castilla y León que sostienen producirá la norma. «Estas medidas son un recorte claro hacia los derechos de las mujeres. Son absolutamente vergonzosas y bochornosas», lamentó la portavoz del PSOE y ministra de Educación, Pilar Alegría. «Pido al señor Feijóo que rectifique este gobierno y garantice a las españolas de esa comunidad que tengan garantizados los derechos sexuales y reproductivos», añadió  la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz.

Por el contrario, precisamente el día 14, la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, que no es precisamente antiabortista, anunciaba la creación de un teléfono de información para mujeres embarazadas «a favor de la vida y no en contra de nadie». «Aunque la izquierda piense que no, son las mujeres quienes deben libremente decidir qué información desean recibir», señaló Ayuso. También el exportavoz del Partido Popular y alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, aseveró, al ser requerido por el anunciado protocolo, que «nadie puede criticar que se ofrezca a las mujeres toda la información para tener elementos de juicio y tomar la decisión que ellas crean que deben tomar».

Apoyan la postura provida de Vox

A los dos días recibía yo por correo electrónico dos mensajes pidiendo el apoyo a Gallardo en este tema, de dos asociaciónes católicas, que recogen habitualmente firmas para apoyar temas cristianos,  Enraizados y Abogados Cristianos.

“Firma y agradece a Juan García-Gallardo su postura provida”, decía José Castro Velarde en nombre de Enraizados, explicando que “El vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo, anunció el pasado viernes un importante paquete de medidas provida que permitirán, entre otras, que las madres embarazadas tengan acceso a escuchar el latido de su bebé y a ver una ecografía 4D de la vida que crece en su interior, antes de abortar. Al refuerzo en la atención psicológica a las madres embarazadas, también hay que sumar la protección para los profesionales sanitarios que decidan objetar conciencia frente a la realización de un aborto. No podemos dejar pasar la ocasión para felicitar a VOX de todo corazón por esta excelente iniciativa por la vida que retrata a su promotor, García-Gallardo, como ejemplo a seguir para otros partidos políticos. Firma y apoya”.

“El Gobierno autonómico -continuaba Enraizados- del Partido Popular matizó poco después el alcance del acuerdo definiéndolo como un conjunto de iniciativas provida, tratando de desvincular su puesta en marcha como una medida contra el aborto. A estas alturas, el PP ya debería saber que el votante católico es provida, profamilia y muy fan de la libertad de llamar a las cosas por su nombre. Teniendo en cuenta que estamos en año electoral algunos deberían plantearse que al ciudadano, que tiene profundos principios éticos y morales, no le temblará la mano para votar al partido político que se posicione claramente en contra del aborto. Por supuesto, en cuanto se hizo pública esta iniciativa, el Gobierno socialcomunista de Pedro Sánchez se puso en marcha y amenazó por escrito a la Comunidad de Castilla y León por defender la vida. Una vez más ellos mismos, los de Mordor, se han posicionado como valedores y defensores de la muerte”.

Por su parte Abogados Cristianos me escribía: “José María, es una auténtica locura: Sánchez y PODEMOS se oponen a que las mujeres escuchen el latido de su hijo y vean una ecografía antes de abortar. Hace apenas unos días, Juan García-Gallardo (VOX), Vicepresidente de la Junta de Castilla y León, propuso unas medidas que salvarán vidas: El ofrecimiento a las embarazadas de escuchar el latido fetal o la posibilidad de realizarse una ecografía 4D. Pero el negocio del aborto y la izquierda están haciendo lo imposible para frenar estas medidas provida… porque perjudican su negocio. No podemos dejar solo a este valiente político comprometido con la vida. Y animarle a que siga trabajando así, para que esto sea el primer paso de más políticas dirigidas a humanizar la sociedad en la que vivimos. Por eso hemos lanzado esta campaña de apoyo a Juan García-Gallardo, con la que le animamos a continuar apostando por la defensa de la vida.  José María, ¿puedes firmar tú también? Sólo tardarás 20 segundos” -y ofrecía un link para pinchar-.

“¡Firma -continuaba Abogados Cristianos- para apoyar las medidas provida de Castilla y León! En Moncloa conocen de sobra las terribles secuelas del aborto… igual que conocen el impacto que tiene para una madre escuchar el latido del corazón de su hijo antes de que nazca. Saben que es una medida que salvará vidas. Por eso el negocio del aborto y la izquierda están haciendo todo lo posible para impedir las medidas provida de García-Gallardo en Castilla y León. Es increíble: el mismo gobierno que te obliga a hacer un curso si quieres tener un perro se enfurece porque un médico ofrezca a una madre escuchar el latido de su bebé. Y sólo puedo sacar una conclusión, José María: El gobierno de Sánchez odia a las mujeres y se niega a proteger su salud. Mientras países como Hungría, Polonia o Estados Unidos avanzan en la defensa de la vida, en España nos venden el asesinato de los más vulnerables como una conquista a la que no se debe renunciar. Mientras miles de mujeres en nuestro país lloran las secuelas del aborto, nuestros gobernantes no hacen nada para evitar ese sufrimiento. (¿Será por intereses particulares, como los de la socialista Blanca Cañedo, propietaria del abortorio Belladona que recibe subvenciones y dinero público?) ¡Incluso están dispuestos a intervenir el gobierno de Castilla y León aplicando el artículo 155! José María, si estas medidas no fueran eficaces, no tendrían tanto miedo. Si escuchar el latido fetal, u observar las pequeñas manitas de un bebé no salvaran vidas no estarían tan asustados. Y si todo esto vale para salvar aunque sea una sola vida, habrá valido la pena. No podemos dejar sólo a este joven político. Tenemos que animarle a que siga implementando medidas en defensa del derecho a la vida”.

Conclusión

Sinceramente, y aunque he firmado las dos propuestas porque estoy en contra del aborto, no creo que las afirmaciones de Gallardo sean tan eficaces contra el aborto ( no creo que las posibles abortistas acepten la información tan abundante que les va a ofrecer la Junta de Castilla y León sobre su embarazo) como para decir que el protocolo de marras es una medida anti-aborto, ni que la izquierda tenga miedo a la aplicación de ese protocolo. Creo que no son más que fuegos artificiales precampaña electoral, llenos de tergiversaciones y afirmaciones interesadas. Bueno, así se lo he comentado a un amigo, que me ha contestado: si esto ha servido para atacar los abortos, bienvenido sea, así que gracias Gallardo y Vox.

Una opinión distinta: el obispo de Alicante

Ante el debate suscitado por la propuesta del Vicepresidente de la Junta de Castilla y León, el obispo de Orihuela-Alicante José Ignacio Munilla comentó en la radio que una primera reflexión que se impone es “qué sentido tiene un escándalo así por el hecho de que alguien haga una propuesta tan sensata como ésta”. La respuesta es que poner sobre la mesa el latido del corazón fetal “pone en jaque muchas cosas, pues hay sonidos que despiertan conciencias, imágenes que sanan cegueras”.

Cuando se está diciendo que abortar no es matar a un niño, escuchar su corazón “es desenmascarar la mentira de quien quiere negar que existe un ser humano vivo en fase de gestación”. Y se pone también en jaque, continuó el prelado, “el concepto progresista y nihilista de libertad, que consiste en decidir sobre una realidad sin querer verla ni oírla”.

La segunda traición: “buscamos el cálculo político”

Pero monseñor Munilla no se limitó a una crítica genérica a lo sucedido, porque el “escándalo” de estos días no lo han montado solo los impulsores a ultranza del aborto, sino muchos de sus teóricos contrarios. “Vivimos en una sociedad donde, más que la verdad, buscamos el cálculo político”, y el PP (que preside el gobierno regional de coalición) se echó atrás cuando pensó que el “efecto mediático” de esta medida no le iba a suponer “rédito en su lucha contra el Gobierno”.

“Una vez más, el PP traiciona la causa provida”, dijo don José Ignacio, antes de recordar que, gobernando Mariano Rajoy con mayoría absoluta, forzó en septiembre de 2014 la dimisión del ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, desautorizado en el último momento al no apoyar el ejecutivo su reforma de la ley del aborto, que entre otros puntos habría eliminado, por discriminatorio, el supuesto de aborto por malformación o enfermedad fetal.

“Pasó entonces y vuelve a ocurrir ahora esa traición», continúa Munilla, aunque ahora no es Rajoy sino Alberto Núñez Feijóo, quien faltando a la verdad dice que no hay ningún pacto, que es una invención del vicepresidente”. Munilla no se retrae al señalar esa falsedad: “¡A ver! ¡Que estaba presente en la rueda de prensa [en la que se anunció la medida] el portavoz del gobierno! ¡No me diga usted que no sabía nada! ¡Estaba usted en la rueda de prensa!”, en alusión a que, junto a García-Gallardo, se encontraba el portavoz del ejecutivo regional, el popular Carlos Fernández Carriedo, que no es precisamente un novato en la política de Castilla y León: en lo que va de siglo XXI, ha sido trece años consejero de la Junta en tres consejerías (entre ellas Sanidad, y ahora Economía) y nueve años portavoz parlamentario del PP en las Cortes castellano-leonesas.

(La radio incluía la reproducción de la rueda de prensa del 12 de enero tras el consejo de gobierno de la Junta de Castilla y León: entre los minutos 4:56 y 6:32, el portavoz (PP) y el vicepresidente (Vox) explican de forma coincidente la naturaleza consensuada y aprobada por el ejecutivo regional de la medidas que a continuación explica Juan García-Gallardo.)

“Los partidos conservadores piensan que donde se juegan el gobierno es en una buena gestión económica o en la cuestión de la unidad de la nación, y que la cultura o la educación son secundarios y se lo ceden a la izquierda”, añadió el obispo al analizar los porqués de esta situación: “El rumbo cultural de Occidente esté marcado por la izquierda desde hace muchas décadas”, analizó el obispo al analizar los porqués de esta situación, “y la derecha va por detrás, con el freno de mano puesto, pero en la misma dirección, con lo que el freno de mano cada vez tiene menos fuerza. Al final, un secularizado de derechas termina pensando lo mismo que un secularizado de izquierdas, porque asumir la secularización, la pérdida de las raíces cristianas, le ha llevado a asumir todas sus tesis. En este caso, a asumir que el aborto es un derecho”.

Lo inaudito

Ahora bien, el problema no es solo político. También mediático, en el caso de medios supuestamente afines a la causa provida. Con sorpresas: “Hemos sido testigos de cómo estos medios (vamos a ser claros: incluida la radio de la Conferencia Episcopal Española, la COPE), en sus tertulias, han tenido la misma reacción que el PP”, de pensar que “esto es un bote de humo” para distraernos de los supuestamente importante: las causas del día a día político.

“¿No será más bien al revés?”, plantea. ¿No será que ese día a día político “es un bote de humo para distraernos de lo esencial, como es el derecho a la vida de los inocentes?”

Munilla considera “inaudito” que el arzobispo de Valladolid, Luis Argüello, en un “gesto valiente donde los haya”, reprochase en directo en la propia COPE, a donde había acudido para presentar el reciente documento de los obispos españoles sobre la situación social, que en las tertulias de la emisora episcopal se hablase “de los derechos de la mujer, incluido el del aborto, como una cuestión consolidada, dando por supuesto que el aborto es un derecho”, algo que “no podemos aceptar”.

De poco sirve que la línea editorial de la cadena de los obispos se conforme a la doctrina social de la Iglesia, “si en sus tertulias los comunicadores distan mucho de tener esa plena conciencia y de asumir con coherencia esos principios, porque quien verdaderamente influye y comunica no es la línea editorial, sino la que se hace en las horas punta de la comunicación”.

“Hemos asumido los puntos de partida del Maligno, el derecho a matar una vida humana inocente”, lamentó Munilla: “¿A dónde hemos llegado?”

Los jueces y el paquete de tabaco

Por último, tras la traición del PP y la sorprendente actitud de la cadena COPE, el obispo de Orihuela-Alicante citó el caso del Tribunal Constitucional, que ha mantenido retenida durante ¡doce años! de mayoría conservadora la sentencia sobre el recurso contra la ley del aborto de 2010, la “ley [Bibiana] Aido” que consagra el derecho a abortar sin causa alguna hasta las 14 semanas de embarazo, es decir, cuando hace ya más de un mes que el latido del niño es perfectamente audible.

Ahora, sin embargo, apenas una semana después de conseguirse una mayoría proabortista en el Tribunal Constitucional, ya se ha anunciado que el recurso se abordará de manera inmediata, el próximo 7 de febrero. El recurso “tiene toda la racionalidad”, dice Munilla, dado que el Tribunal Constitucional, en su sentencia de 1985 sobre la primera ley del aborto española, dictaminó que el nasciturus tiene derecho a la vida y por tanto es un bien jurídico protegible, algo incompatible con una ley de plazos como la vigente, que hasta la semana 14 deja la vida del niño a merced de lo que decida su madre.

LO ÚLTIMO                   

El pasado día 3, unas declaraciones de Ignacio Garriga, secretario general de Vox, ponen la último que he visto en el tema. Le preguntan en una entrevista en El Día: -Mañueco aseguró que el famoso ‘protocolo’ no existe y no se va a implantar. ¿Era una medida pactada y Vox ha renunciado a ella?

Vox no ha renunciado ni renunciará nunca a nada. Ni el PP ha renunciado a lo que pactó con Vox. Emplazo a todos los castellanos y leoneses a que acudan a la web de la Junta, donde se visualiza ese protocolo. Sin duda, nosotros estamos presionando para que con la mayor celeridad e inmediatez posible salga escrita la orden a los médicos y centros sanitarios. Pero no se ha tirado para atrás, ni Vox ni PP han renunciado a ese acuerdo porque, como digo, sigue publicado y por tanto es cuestión de la Consejería de Sanidad, cuyas interioridades yo no conozco, que termine de redactar ese protocolo. Pero que todo el mundo tenga muy claro que ese protocolo va a salir.

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA

Tres foramontanos en Valladolid

Con el título Tres foramontanos en Valladolid, nos reunimos tres articulistas que anteriormente habíamos colaborado en prensa, y más recientemente juntos en la vallisoletana, bajo el seudónimo de “Javier Rincón”. Tras las primeras experiencias en este blog, durante más de un año quedamos dos de los tres Foramontanos, por renuncia del tercero, y a finales de 2008 hemos conseguido un sustituto de gran nivel, tanto personal como literario.

Lo más leído