Café de la Princesa, del Born a Nueva York

Gastronomía, moda y arte se dan cita en un exclusivo multiespacio y escaparate de las últimas tendencias en el corazón del Born barcelonés. Los paladares más exquisitos, los buscadores de lo último en diseño y todos los espíritus inquietos, al fin y al cabo, tienen una buena dirección detrás del Museo Picasso, en el Café de la Princesa. Es decir, en el bello entramado de callecitas que dibuja el Born, uno de los barrios con mayor proyección artística y comercial de la Ciudad Condal.

Y el Café es noticia porque acaba de inaugurar una interesante exposición de fotografía Visiones de Nueva York, con fotografías de Roberto Varela y Xan Padrón, que explican así: «Que Nueva York es una ciudad fotogénica resulta una obviedad. Y también lo puede resultar el hecho de que sea, quizás, la ciudad más fotografiada del mundo. Sin embargo, también es cierto que es imposible no sucumbir a la fascinación del impacto visual, y sobre todo, emocional, que produce el pasearse por sus calles y perderse entre su enorme marea de almas solitarias. Las “sparkling and hurrying tides”, como las llamaba Walt Whitman. Esta muestra de imágenes/visiones recoge dos intenciones documentales diferentes y distantes que convergen, sin haberlo querido, en una misma mirada. Y esta mirada acaba dirigiéndose hacia el mundo de sombras y de luces que impregna a sus habitantes. Puentes, reflejos en el agua, rascacielos (“poéticos y terribles” en palabras de nuestro poeta en Nueva York), Broadway, Coney Island, viento gélido, nieve gris, melancolía y mucha, mucha soledad. Los vacíos de un entorno repleto. El contraste entre el movimiento y la quietud, entre el bullicio y el silencio de la capital del ruido. Los contrastes entre el interior y el exterior de una ciudad y de sus habitantes cuyos rostros permanentemente cambiantes se nos presentan con el aspecto de una eterna intemporalidad. Una visión personal a través de los objetivos de nuestras cámaras sobre la relación entre nuestra querida Nueva York y la
percepción más intima que cada uno de nosotros tenemos de ella».(Roberto Varela/Xan Padrón)

Volviendo al local que acoge la exposición, desde la entrada se respira una atmósfera especial: mezcla de buenos sabores en el apartado de gastronomía; sofisticados y modernos diseños en moda; y objetos para decorar el hogar o descubrir el mejor regalo en la tienda; además de exposiciones y otras muchas propuestas artísticas y culturales. Este café de aire bohemio va más allá del negocio puramente hostelero ya que es también un escaparate para nuevos creadores y una plataforma cultural. Un solo espacio, por lo tanto, que encierra una oferta tan interesante y variada que invita a volver una y otra vez.

En la entrada de la calle Sabateret, encontramos el restaurante, con capacidad para 130 comensales. Se divide en varias áreas con especial protagonismo del atrio central coronado por una cristalera que regala luz natural. Además, existen dos semi-reservados, perfectos para reuniones más íntimas. En familia, con la pareja o entre amigos, Café de la Princesa es un local muy camaleónico, que brinda la posibilidad de degustar una cocina cuyo componente clave es dar de comer bien, con un toque de creatividad a partir de recetas tradicionales. Entre la amplia variedad de platos, destacan el ‘filet mince’ salteado con cebollitas glaseadas y arroz basmati al curry; el atún rojo salteado con aguacate y soja o el ‘trinxat’ de huevo frito con patata paja y gambas. Los postres son, sencillamente, irresistibles.

Por otro lado, Café de la Princesa también ofrece un equilibrado, variado y muy económico menú del día. En cuanto a la carta de vinos, incluye 50 referencias y una interesante apuesta por los cavas. Cabe destacar que mientras el comensal elige su vino favorito, tiene entre sus manos una bella obra de arte realizada por el reputado pintor Pere Munné, que ha hecho de cada una de ellas un alarde de creación artística única. El precio medio de la carta es de 40 €. El horario de cocina es de lunes a domingo de 13:30 a 16:00 y de 21:00 a 00:00 horas. Cierra domingos noche.

La entrada por la calle Flassaders está ocupada por la tienda de moda, con firmas tan prestigiosas como la línea femenina de la coreana afincada en Barcelona Julie Sohn y la danesa Sand, tanto para ella como para él. Sohn es un valor en alza dentro del panorama actual y sus creaciones han podido verse sobre la Pasarela Cibeles. Ambas marcas se dirigen a un cliente que huye de la uniformidad a la hora de vestir.

Además, se expone una amplia selección de complementos, muebles y artesanía procedentes de diversos rincones del mundo. Es una sugerente colección de artículos originales, de diferentes estilos y, sobre todo, difíciles de encontrar que llegan hasta esta dirección del Born después de una ardua búsqueda de los responsables del café por los lugares más insospechados del mundo. Siempre es posible hallar un detalle bonito entre la multitud de piezas procedentes de Polonia, India, Marruecos, Francia, Estados Unidos o Italia, entre otros. El horario de la tienda es de lunes a viernes de 11.00 a 21.00 horas, sábados hasta las 22.00 horas y domingos de 12.00 a 15.00 horas.

Café de la Princesa
c/ Sabateret, 1-3 con Flassaders, 21.
Barcelona.
Tel. 93 268 15 18.
Web: www.cafeprincesa.com

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Autor

Juan Luis Recio

Blogger gastronómico y de tendencias, crítico de vinos (XL Semanal), letrista, sociólogo, mensista, poeta

Juan Luis Recio

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