(PD).- Las economías emergentes del G5 -formado por Brasil, México, India, China y Sudáfrica- pidieron hoy la intervención de la comunidad internacional y de la ONU en la crisis alimentaria, e instaron al Grupo de los Ocho países ricos (G8) a reducir sus emisiones de gases con efecto invernadero.
«Es necesaria la intervención de la comunidad internacional para desarrollar con urgencia mecanismos útiles para hacer frente al alza de los precios y asegurar las previsiones de desarrollo», dijo el presidente mexicano, Felipe Calderón, en la lectura de la declaración conjunta al término de la reunión celebrada en la ciudad japonesa de Sapporo.
En relación al cambio climático, el Grupo de los Cinco, que son las mayores economías en desarrollo, indicó en su manifiesto que «es esencial que los países desarrollados asuman el liderazgo para lograr reducciones ambiciosas y absolutas de la emisiones de gases
con efecto invernadero».
Los países desarrollados deben reducir los gases «en concordancia con sus metas cuantificadas de reducción de emisiones bajo el Protocolo de Kioto después de 2012, en niveles de al menos entre el 25 al 40 por ciento para reducción de emisiones en 2020 respecto a los niveles registrados en 1990, y entre el 80 y 95 por ciento para reducción de emisiones en 2050 respecto a los niveles registrados en 2020».
La reunión de los miembros del G5 antecedió a la que mañana mantendrán con el Grupo de los Ocho, que esta integrado por Alemania, Canadá, Estados Unidos, Rusia, Italia, Francia, Reino Unido, Japón.
