(PD).- Los islamistas somalíes han lapidado hasta la muerte a una mujer acusada de adulterio, en la que ha sido la primera ejecución pública perpetrada por las milicias islámicas desde hacía dos años, según informaron hoy testigos presenciales.
La mujer fue ejecutada ayer por la tarde en presencia de cientos de personas reunidas en una plaza de la ciudad portuaria de Kismayu (sur), ocupada por los insurgentes islamistas el pasado mes de agosto.
Los guardias abrieron fuego en el momento en que un familiar corría hacia ella y causaron la muerte de un niño, precisaron los testigos.