"La Policía ha empezado a dispararnos, nos están persiguiendo", fue lo primero que Tamerlán dijó a su madre, Zubeidat Tsarnaeva
Tamerlan Tsarnaev, el mayor de los dos terroristas del Maratón de Boston, se tomó unos segundos en los que fueron sus últimos instantes de vida, para llamar a su madre y decirle que la quería.
Fue el viernes, 19 de abril de 2013, a primera hora de la mañana cuando él y su hermano Dzhokhar están en medio de un feroz tiroteo con la Policía y acaban de matar a un agente en la Universidad.
«La Policía ha empezado a dispararnos, nos están persiguiendo», fue lo primero que Tamerlán dijó a su madre, Zubeidat Tsarnaeva.
Todo, mientras el más pequeño de los hermanos, a quien Tamerlan manejaba como un muñeco, lanzaba ollas exprés con explosivos a los agentes y cuando ambos habían apretado el gatillo ya más de doscientas veces.
Antes de colgar, Tamerlán musitó: «Mamá, te quiero».
Cuando se quedó sin balas, intentó abrirse paso corriendo, pero fue abatido y ya en el suelo, atropellado por su propio hermano, que huyó en un coche.
Según ha revelado ‘The Wall Street Journal’, Zubeidat Tsarnaeva había llamado un día antes a Tamerlán, alarmada por las noticias que llegaban de Boston.
Cuando la madre preguntó si estaba seguro, el tipo se limitó a reir y a decir fanfarrón: «¿De qué te preocupas, si no es nada».