Este miércoles 27 de enero de 2021 comenzaron muy rápido a pasar cosas, como dos nuevos ministros prometiendo la Constitución ante el Rey; una de ellas la nueva de Sanidad, y el otro, el bailongo Miquel Iceta.
El catalán que dejó su hueco en Madrid al ya exgestor de la pandemia en España, Salvador Illa, pilla cacho en el ministerio de Política Territorial, algo que ni en sus mejores sueños podría imaginar.
Ahora se pondrá en unos 100.000 euros al año alguien que no terminó la carrera y que no tiene experiencia en empresa privada porque lleva desde los 18 años trabajando para el Partido Socialista catalán. Tendría guasa si no fuera tan grave.
No es una broma, Iceta nombrado Ministro de algo.
Horror?????? pic.twitter.com/SCEypQA6T8— Manufer (@Manufer222) January 26, 2021
Estaba tan contento Iceta cogiendo su nueva cartera de ministro que quiso hasta llevarse a su tía Rosa Mari al acto. Juzguen ustedes mismos:
Osea yo no puedo ver a mi familia pero Iceta sí puede llevarse de sarao a su tía Rosa Mari… https://t.co/BI78OYFDO7
— María (@enafalliv) January 27, 2021
Pero lo mollar de la situación lo comentó Carlos Herrera en su editorial en COPE en esta misma mañana:
Yo les confieso afecto personal a Miquel Iceta, es listo, es experto de política entre bastidores y algunos dicen que llega al Ministerio de Política Territorial de premio de consolación.
Cuidado porque vamos a ver quién es Iceta, que es un señor encantador, es partidario de los indultos, de la España plurinacional, descubrió ocho naciones en España, cosa que la Constitución que va a jurar no contempla. Eso de que las naciones son ocho, entonces los demás qué son. Es español el que no puede ser otra cosa. Bueno, pues el que hace este lío va a ser ministro de la Política Territorial, que es una cosa que está por el derecho a decidir.
El último apunte, de Rosa Díez:
Sánchez coloca a Iceta en el ministerio para organizar la demolición institucional de la Nación española. Traición. pic.twitter.com/QOMwXOYsPB
— Rosa Díez (@rosadiezglez) January 26, 2021
El personaje bailongo que se comió al político
En Periodista Digital publicamos hace seis años que Miquel Iceta había dejado de lado al político, absolutamente absorbido por el personaje bailongo que le había catapultado a la fama:
Ahora, Iceta siente que hay cosas positivas que sus bailes le dan, como poder llegar a más gente, pero por otro lado se siente menospreciado en su labor política por culpa de los bailes…