Es un clamor. Cada vez es más evidente que el socialista García-Page en cuanto no se tapa un poco se le ve el plumero. El jueves de la semana que viene, 14 de julio, será el día en el que podrá demostrar con hechos si su palabra tiene valor, y si va acompañada de hechos.
El jueves 14 de julio, el Pleno del Congreso de los Diputados votará el Dictamen de la Comisión Constitucional sobre el Proyecto de Ley de Memoria Democrática. Sí. Ese que el PSOE ha diseñado conjuntamente con Bildu. Ese que establece que los terroristas de ETA son víctimas con derecho a recibir una indemnización. Ese que reconoce a los salvajes etarras por haber luchado por la consolidación de la democracia, los derechos fundamentales y los valores democráticos.
El 14 de julio se tendrán que retratar los 350 diputados nacionales. Entre ellos los 9 pertenecientes al PSOE de Castilla-La Mancha. Y de ellos, destaca uno muy relevante para el socialista castellano manchego: su numero 2, el secretario de organización del PSOE, Sergio Gutierrez.
Emiliano García Page podrá demostrar ese día si sus palabras grandilocuentes sobre la defensa de las víctimas de los salvajes terroristas de ETA son creíbles, o si es un nuevo ejercicio de hipocresía política sin ningún tipo de vergüenza ni pudor.
Si ese día, Sergio Gutierrez vota a favor de dicho Dictamen sobre la Ley de Memoria Democrática, Emiliano García-Page demostrará con hechos que efectivamente, como él mismo se calificó, es el “monaguillo de Pedro Sánchez”.
Con la gravedad de que, en esta ocasión, el seguidismo sin límite a Pedro Sánchez llega a blanquear el asesinato de 8 castellano manchegos por parte de la banda terrorista ETA.
El pasado 30 de junio, Emiliano García-Page no hizo absolutamente nada para evitar que la Comisión Constitucional aprobara este Dictamen con el que se impugna la existencia de la Transición, se legitiman los casi 400 asesinatos que ETA cometió salvajemente desde el año 1975 hasta 1983 y, no menos relevante, condenan al PSOE de Felipe González que llegó al Gobierno de España un año antes, en 1982.
Un Dictamen que en Castilla-La Mancha ha generado asco y un absoluto rechazo. Asco pues insulta directamente. Asco tras a 8 castellano manchegos asesinados por ETA. Desde 1975 a 1983, ETA asesinó a 8 castellano manchegos: 5 guardias civiles, un coronel retirado, un vendedor ambulante y un teniente de la Policía Nacional.
Andrés Segovia Peralta. Tenía 40 años y era natural de Moral de Calatrava (Ciudad Real). Era un agente de la Guardia Civil que fue asesinado por ETA, en 1975, en Guernica.
Angel Rivera Navalón. Era natural de Socuellamos (Ciudad Real) y agente de la Guardia Civil que fue asesinado por ETA el 8 de octubre de 1977 en Guernica.
Domingo Merino Arévalo. Tenía 28 años y era natural de Ciudad Real. Era un vendedor ambulante y fue asesinado por ETA el 5 de julio de 1978 en Zarauz.
Diego Fernández-Montas Rojas. Tenía 63 años y era natural de Herencia (Ciudad Real). Era un coronel retirado y fue asesinado por ETA el 17 de diciembre de 1978 en San Sebastián.
Antonio Ales Martínez. Tenía 19 años y era natural de Cuenca. Era un agente de la Guardia Civil, y fue asesinado por ETA el 28 de noviembre de 1979 en Azpeitia.
Aurelio Navío Navío. Tenía 33 años y era natural de Tordellego (Guadalajara). Era un agente de Guardia Civil, y fue asesinado por ETA el 13 de julio de 1980 en Aia.
Juan García González. Tenía 21 años y era natural de Marchamalo (Guadalajara). Era agente de la Guardia Civil, y fue asesinado por ETA el 4 de julio de 1982 en Burguete (Navarra)
Julio Segarra Blanco. Tenía 50 años y era natural de Cabanillas del Campo (Guadalajara). Era un teniente de la Policía Nacional, y fue asesinado por ETA el 4 de mayo de 1983 en Bilbao.
Ha calado tanto en Castilla-La Mancha que la palabra de Emiliano García-Page no tiene valor, que nadie duda de que el 14 de julio no cesará a su número 2 cuando vote a favor de esta barbaridad proetarra. En la calle hace mucho frío y necesita que su jefe Sánchez le mantenga como candidato socialista en las próximas elecciones autonómicas, dejando de mirar a su alternativa, la ministra portavoz Isabel Rodríguez.
Eso sí, todavía habrá ingenuos -medios de comunicación incluidos- que seguirán comprando su mercancía averiada y su hipocresía contrastada.
