El Presidente Sánchez, sus socios y sus medios de comunicación ‘comprados’, tanto los de palabra escrita como los audiovisuales, han dedicado palabras de descalificación y ninguneo a la manifestación celebrada en Madrid (Cibeles) el pasado sábado 21 de enero, que bajo el lema: “Por España, la Democracia y la Constitución”, fue promovida por múltiples asociaciones ciudadanas independientes y contó con la presencia, representación y apoyo de los tres principales partidos políticos de la derecha española -PP, VOX y C’s- que no olvidemos, obtuvieron en las últimas elecciones generales el respaldo de más de 10,2 millones de votantes.
Gritos de “Gobierno dimisión”, “Pedro Sánchez traidor” y “Libertad, libertad, libertad” fueron coreados insistentemente durante la manifestación.
Pero una vez más este gobierno ‘fracasó’ y ‘suspendió en matemáticas’ de una forma interesada y descarada en la estimación de asistentes a dicha manifestación calculando, al estilo Tezanos, que solo había unos ¡31.000 manifestantes! lo que a todas luces es una falsedad más, porque viendo la masiva ocupación de la plaza de Cibeles y la de sus calles adyacentes, según otras fuentes contrastadas, podría estimarse en unos 300.000 manifestantes.
Pero, aún siendo un dato que no carece de importancia, creo que unos miles de asistentes arriba o abajo no deben servir para enmascarar el verdadero motivo de lo que, bajo mi punto de vista, fue tan solo una ‘mínima representación’ del sentir actual de una gran parte del pueblo y de la ciudadanía en general que empieza a despertar de un largo letargo de más de tres años, habiendo consentido que este ‘gobierno multicolor’ bajo la dirección ‘coaccionada’ de Sánchez haya hecho y desecho a sus anchas lo que le ha venido en gana, invadiendo Derechos, Instituciones, Leyes y mezclando para su interés, los tres poderes fundamentales del Estado (Legislativo, Ejecutivo y Judicial)
Es justo resaltar que la citada manifestación, a pesar del gran número de asistentes, se saldó sin incidentes y sin necesidad de intervención policial. No hubo rotura de mobiliario urbano, ni de escaparates, ni incendio de papeleras o de contenedores y ningún tipo de agresiones, lo que marca una gran diferencia con las manifestaciones convocadas por los partidos de izquierda e independentistas que finalizan sistemáticamente con disturbios y algarabías que provocan cuantiosos y graves daños materiales, saqueos, robos, enfrentamientos y agresiones requiriendo siempre la necesaria intervención de las Unidades Antidisturbios de la Policía o de la Guardia Civil.
¡El civismo y la educación no debería ser privativo de una tendencia política!
Pero hace unos pocos días hemos tenido ocasión de presenciar un espectáculo bochornoso y anti democrático en la Universidad Complutense de Madrid y más concretamente en la Facultad de Ciencias de la Información. La presidenta de la Comunidad de Madrid -Isabel Díaz Ayuso- asistía a recoger un diploma otorgado por dicha Universidad distinguiéndola como ‘Alumna Ilustre’ y al parecer el ‘Sindicato de Estudiantes’ de claro cariz izquierdista -encabezado por su portavoz que ni pertenece a la Universidad Complutense- le habían preparado un ‘especial recibimiento’, precisando de un fuerte despliegue policial ya que un buen número de estudiantes la esperaban tanto fuera como dentro de la facultad para abuchearla, insultarla e incluso hubo intentos de agresión.
No obstante otro buen número de universitarios se enfrentaron verbalmente a los que gritaban e insultaban a Ayuso aplaudiendo y contrarrestando la protesta.
Pero una vez en el Salón de Actos, y haciendo gala de una deplorable falta de educación y respeto, impropia de un colectivo universitario, siguieron insultándola con gritos de ‘asesina’, ‘fascista’, ‘machista’, etc., dándose además la circunstancia que una alumna -Elisa- distinguida por tener un expediente con la mejor nota de la Facultad en la rama de Audiovisuales, se dirigió a la Presidenta Ayuso desde el atril con un lenguaje más propio de una ‘exaltada activista’ que de una estudiante universitaria, llegándole a decir en tono insultante… “Ayuso ‘pepera’ los ilustres están fuera”
Tengo que reconocer que, como antiguo alumno de la Universidad Complutense de Madrid (Facultad de Medicina) he sentido pena, indignación y rabia al ver como la ultra izquierda política ya no respeta ni la Universidad, que sólo debe servir para fomentar el Saber, los Conocimientos y la Educación de los futuros profesionales y no convertirla en un centro de ‘adoctrinamiento político’ que sirva para generar violencia y enfrentamiento entre los propios estudiantes.
Vergonzosas han sido las manifestaciones de diversos líderes políticos de izquierda que acusan a Ayuso de “Ir a provocar” a la Universidad. ¿Porqué ?
Vergonzosas las declaraciones del Ministro de Universidades, el socialista -Joan Subirats- quien “critica el nombramiento de Ayuso por la Complutense como alumna ilustre” y considera como “normal el escrache que le han hecho”.
¡Magnífico señor ministro! pero que ‘manga ancha’ tenemos cuando el escrache no lo sufren los suyos ¿Verdad?
Vergonzoso el silencio de la Ministra de ‘Igual dá’ -Irene Montero- y ‘sus chicas’ comunistas de UP ante las agresiones verbales y casi físicas (evitadas por la Policía) que ha sufrido esta Mujer aunque no sea de izquierdas como usted.
Por cierto, parece ser que su Ministerio de ‘Igual dá’ ha otorgado 20.607 euros a ‘Libres y Combativas’, asociación de la izquierda radical conocida por sus manifestaciones contra la presidenta madrileña, lo que hace sospechar quién podría estar tras el escrache. ¿ ?
Entre esto y su Ley del ‘sí es sí’ creo que si tuviese vergüenza se debería retirar a su ‘casoplón’ y desaparecer de la vida política en donde, en buena lógica, ni por su preparación ni por sus méritos propios debió entrar jamás y mucho menos convertirse en ‘Ministra’.
No me resisto a finalizar este artículo sin hacer mención a una noticia que ha saltado a algunos medios de comunicación, pero discretamente y sin gran difusión, y es el procesamiento de 45 miembros de la Policía Nacional (Juzgado de Instrucción 7 de Barcelona) que intervinieron en los graves disturbios protagonizados por los CDR en Barcelona con motivo del 1-O siendo acusados de ‘cargas desproporcionadas’ y que ‘su actuación podría constituir delitos de torturas, contra la integridad moral o lesiones’.
No deja de ser chocante y deplorable que estos hombres, que cumplían órdenes de la Autoridad Judicial para impedir que se celebrase un Referéndum ilegal, sean juzgados ahora por repeler las agresiones de grupos violentos que les atacaban con el lanzamiento de todo tipo de objetos.
Mal nos irá si en una Sociedad que se jacta de ser Democrática, le quitamos autoridad a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado encargados de nuestra protección y de evitar actuaciones ilegales y le damos la razón a los que, con extrema violencia y usando una táctica y unos medios propios de ‘guerrilla urbana’, se enfrentaron a ellos en número muy superior.
¡Paz en Ucrania!
José Manuel García Albarrán
Médico jubilado