Un luchador brasileño de artes marciales mixtas (MMA) protagonizó un inusual episodio esta semana en una pelea por el FFC 40 en Lima, Perú, al aprovechar un descanso entre asaltos para pedir un trago de cerveza al público, según recoge rt y comparte Paula Dumas para Periodista Digital.
Paulo Bananada había disputado el primer ‘round’ de su lucha contra el peruano Johnny Iwasaki, pero, en vez de sentarse y tomar una bebida hidratante, procedió a escalar la valla del perímetro y apuntar con el dedo hacia un vaso con alcohol, que le fue alcanzado de inmediato por un espectador.
Pese a la determinación por conseguir la refrescante bebida, Bananada, no obstante, pudo haber recurrido al público por frustración: transcurrieron varios segundos sin que un miembro de su equipo le proveyera un taburete y le hidratara, y su esquinero se hizo presente en el octágono solo para cuando ya estaba bebiendo la cerveza.
El alcohol aparentemente no fue de ayuda: el luchador de 34 años acabó perdiendo el combate ante su rival de 43 años por decisión unánime de los jueces.
