Un whisky vinculado al vino

Es un whisky, sí, y además single malt, pero ha sido afinado 24 meses en barricas utilizadas previamente en el envejecimiento del vino tinto Pago de los Capellanes, Parcela El Picón 2004, que es un vino complejo y de alta expresión, el buque insignia de una bodega que elabora unos vinos muy reconocidos por los aficionados.

Esta es la noticia: Benromach, una de las destilerías de mayor tradición artesanal, situada en el corazón del Speyside en Escocia y propiedad de Gordon & MacPhail y la bodega ribereña Pago de los Capellanes acaba de presentar un producto fruto de una colaboración entre ambas empresas, Benromach Picón Wood Finish.

Este inusual whisky de malta tuvo un primer envejecimiento de cinco años en barricas de jerez y bourbon, y fue posteriormente trasegado para su afinamiento durante 24 meses más en barricas de roble francés utilizadas anteriormente para envejecer Picón 2004.

El uso de estas barricas ha conferido a este malta unas notas sutilmente vinosas y de dulzor de caña sobre un fondo de fruta madura que combinan y complementan elegantemente las notas ahumadas y de menta fresca del Benromach.

El resultado de esta combinación ha dado lugar a un malta muy elegante, perfumado, complejo y fresco, con notas de dulzor y ahumados, balsámico, cremoso y frutal.

La selección de las barricas para el afinado del whisky se llevó a cabo durante una cata profesional entre responsables de Amer Gourmet, importadora de Benromach para España, y el enólogo y equipo técnico de la bodega Pago de los Capellanes. Se seleccionaron tres magníficas barricas Radoux de grano fino y tostado medio que contenían Picón 2004 en primer llenado y se esperó a que finalizara su crianza de 26 meses para enviarlas a Escocia.

Benromach 2002 afinado en barricas de Picón 2004 ha sido embotellado en agosto de 2009 y se trata de una serie limitada que consta de 1.200 botellas para todo el mundo.

La destilería Benromach se distingue por recuperar las prácticas más tradicionales de la destilación del whisky de malta, al tiempo que es una de las más activas en hacer series especiales muy limitadas, sin ninguna concesión a los condicionantes comerciales.

Entre las series especiales de Benromach destaca la de los “Wood Finish”, acabados en barrica o afinados del malta. Benromach afina esos maltas durante muchos meses, incluso años, hasta que se alcanza el mejor ensamblaje y armonía posibles entre el whisky y la madera de la barrica impregnada por el vino o el destilado que había contenido antes.

En esta filosofía de entender el binomio malta-barrica es absolutamente primordial tanto la calidad y características de la barrica que se emplea en el afinado como, por supuesto, la calidad del vino o destilado que ha contenido previamente. PVP orientativo: 70 euros.

Gordon & MacPhail es una empresa familiar con 114 años de actividad ininterrumpida. Está considerada unánimemente como el referente de calidad del whisky de malta en el mundo y se le reconoce su experiencia así como el extremo cuidado y la importancia que concede a la calidad de las barricas que emplea para envejecer sus whiskies.
En su dilatada historia ha recibido una gran cantidad de premios y reconocimientos al que hay que sumar el tal vez más prestigioso de todos: el reciente «Queens Award for Entreprise for International Trade», que premia a su impecable trayectoria internacional y el haber situado a sus whiskies en las mejores mesas y establecimientos de todo el mundo.

Benromach es la destilería más pequeña y artesanal del Speyside en Escocia. Fundada en 1898, actualmente pertenece a Gordon & MacPhail.

Pago de los Capellanes está situada en pleno corazón de la Ribera del Duero, a un kilómetro escaso de Pedrosa de Duero y en sus orígenes, a principios de los ochenta, apenas contaba con unos miles de cepas. El matrimonio Rodero-Villa, rodeados de un excepcional equipo y apostando por una forma muy particular de concebir el vino, ha logrado que hoy en día, Pago de los Capellanes supere las cien hectáreas de viñedo propio en espaldera, de tempranillo o tinto fino, que rodean la bodega.

La producción reducida permite un estricto control de la calidad final del producto así como el seguimiento personal de todas las partidas embotelladas. El rendimiento permitido de los viñedos es de cinco mil kilos por hectárea, un claro ejemplo de la apuesta por la calidad de la materia prima.

El Picón es el vino cumbre de la Bodega Pago de los Capellanes. Procede de una parcela de 2 hectáreas acabada en Pico, de ahí su nombre “Picon”, situada en una sinuosa colina orientada norte-sur de suelo especial arcilloso calcáreo, las peculiaridades genéticas de la viña y el especial microclima de la parcela producen un tempranillo de racimo suelto que permite una perfecta maduración a todas sus bayas y una gran bondad de sus taninos.

El resultado es un vino de intenso color cereza picota con aromas florales y de mora bien ensamblado con las barricas de roble francés obteniendo toques especiados como la canela, el cuero, el tabaco, la trufa y el regaliz negro, en boca es complejo con taninos dulces que envuelven el paladar y que cubren las papilas con una redondez aterciopelada y exquisita, es ampuloso y persistente. Solo se elabora Picón en las añadas excepcionales como fue la del 2004.

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA
Autor

Juan Luis Recio

Blogger gastronómico y de tendencias, crítico de vinos (XL Semanal), letrista, sociólogo, mensista, poeta

Juan Luis Recio

Blogger gastronómico y de tendencias, crítico de vinos (XL Semanal), letrista, sociólogo, mensista, poeta

Lo más leído