PRIMERA FINALISTA DEL CERTAMEN
(¡ASÍ SE TIENDEN PUENTES!, SÍ, SEÑORA)
Ayer, martes (no es un dato baladí que, dentro de la mitología romana, Marte fuera el dios de la guerra), 29 de octubre de 2019, se consumió la primera semana (de las tres hábiles de que consta el plazo) para poder presentarse al prestigioso (no me jodas con tus jodas, tú; no seas irónico; adjetívalo como se merece: “sonrojante” y vergonzoso) Concurso de Sandeces. Con dicho motivo, el comité editorial de la entidad convocante del susodicho premio, la revista satírica Sarcasmos a tutiplén, citó a los miembros del jurado para que decidieran quién, según sus ponderados criterios, se había hecho digno/a merecedor/a de la condición de finalista (de la prima hebdómada).
Adjunto a continuación el texto íntegro del acuerdo al que llegaron.
Reunidos los abajo firmantes, Emilio González, “Metomentodo” (presidente); Elvira González, “Metáfora”; Evaristo Gómez, “Meteoro”; Edurne Gotor, “Metonimia”; Eladio Golosinas, “Metaplasmo”; y Ángel Sáez, “Otramotro”, en calidad de secretario (con voz, pero sin voto), a fin de escoger al primer finalista (ella o él) del afamado (por la irritación que otorga a quien lo gana, no por su aprecio o estimación) Concurso de Sandeces, hoy, madrugada ya del miércoles, 30 de octubre de 2019, hemos llegado por unanimidad al siguiente acuerdo. Habiendo analizado, de manera concienzuda, a los candidatos (hembras y varones), considerados los pros y los contras de cada uno de ellos, tras las oportunas deliberaciones, hemos convenido que la presidenta de la Asamblea Nacional Catalana, ANC, Elisenda Paluzie, por una bárbara y necia declaración (en concreto, esta, en catalán —que, traducida, queda así—: “Son estos incidentes los que hacen que estemos en la prensa internacional de manera continuada estos días, es decir, que hacen visible el conflicto”), aseverando, sin que un ápice o pizca de arrebol le subiera al rostro, que la violencia habida durante los últimos días en Cataluña tenía una parte positiva, porque les daba notoriedad mediática en el orbe, se había hecho acreedora de ser finalista del único certamen que premia a la contra o a la inversa, pues concede al ganador la opción de poder elegir entre dos galardones ultrajantes, el baldón de gilipollas o el sambenito de tonta/o del bote (o, en su defecto, del haba).
Nos permitimos hacer la siguiente sugerencia a los máximos responsables de los Cuerpos de los Mossos d´Esquadra, la Policía Nacional y la Benemérita; que pongan todos los medios que tengan a su alcance para que la integridad física de la finalista, la señora Paluzie (¿es esa su manera de tender puentes?) no sufra daño o menoscabo alguno.
Confiamos, deseamos y esperamos que ningún energúmeno exaltado tome el rábano por las hojas, o sea, siga el mal ejemplo dado por doña Elisenda Paluzie y le demuestre, de manera fehaciente, lo equivocada que estaba cuando sostuvo lo que aireó a los cuatro vientos, que la violencia da notoriedad.
Elisenda Paluzie merece una reprimenda, un palo (verbal), sí, por haber considerado que la violencia acaecida en Cataluña durante los días pasados, al finalizar algunas protestas cívicas y democráticas para (de)mostrar los manifestantes que acudieron a las mismas su profundo malestar con la sentencia del Tribunal Supremo, que juzgó los hechos (constitutivos de delitos) del procés y condenó a los dirigentes independentistas no fugados, hace visible el conflicto catalán en el mundo.
Emilio González, “Metomentodo” (presidente); Elvira González, “Metáfora”; Evaristo Gómez, “Meteoro”; Edurne Gotor, “Metonimia”; y Eladio Golosinas, “Metaplasmo”.
Ángel Sáez García
