Twitter, muy puritana la red social del estornino a la hora de proceder a la suspensión o bloqueo de cuentas en cuanto detecta que hay comportamientos que se alejan de las normas de la convivencia, suele tener curiosas fallas.
Por ejemplo, a Hermann Tertsch, periodista y actualmente eurodiputado de Vox, le suspendieron durante una semana la cuenta por cuestiones meramente ideológicas. No había insultos, amenazas o incumplimientos de las normas de comportamiento.
Sin embargo, si alguien de la progresía se despierta de buena mañana y suelta un rebuzno contra una tertuliana como Cristina Seguí, entonces no solo no pasa nada, sino que encima los ‘moderadores’ de Twitter le contestan a la afectada que no han visto nada punible.
Es decir, que soltarle a Seguí insultos como «gilipollas» o «hija de la gran puta» es algo normal y corriente. Prueben a hacerlo ustedes, y dirigirle improperios de este tipo a Alberto Garzón, por poner un ejemplo, que ya verán que pronto les cierran la cuenta.
Twitter dice que… “¡ni que te hubieran llamado socialista, pija!” pic.twitter.com/syDpKnY5wM
— ???????? ????í (@CristinaSegui_) October 24, 2019