TODO TERMINA PARA EL COBARDE EN UN SHOW PATÉTICO DE LA MUSA DEL PROCÉS

El final más patético posible para Puigdemont: Rahola cantando el Bella Ciao en plena calle

Seguramente habrá imaginado muchas veces Carles Puigdemont cómo sería su regreso triunfal en Cataluña. Alguna vez menos, pero seguro que también, cómo sería su detención.

Lo que no podría esperar jamás el expresidente de la Generalitat y golpista cobarde es que su detención fuera en Cerdeña (Italia) y todo terminara con una penosa performance de Pilar Rahola, la musa del procés. 

La tertuliana se ‘manifestó’ así, en las calles de Barcelona -rodeando el consulado italiano-, junto a otros trasnochados de amarillo, cantando el Bella Ciao por el huidizo Puigdemont.

Este himno pertenece a la resistencia italiana contra el fascismo de Benito Mussolini y las tropas nazis durante la Segunda Guerra Mundial, y hoy en día cualquier piernas, como los indepes, creen que significa algo para ellos si lo cantan.

Pero claro, que se van a esperar de alguien que huyó en un maletero pero que dice para sí que nunca habrá rendición…

Finalmente, que Rahola es un esperpento lo representa ella misma cada día que le dejan en alguna tele, pero este show patético se lleva la palma.

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