Cuca Gamarra criticó la gestión de la ministra en el Congreso

Nadia Calviño se echa una vez más la soga al cuello con los fondos europeos

El periodista Francisco Mercado asegura en Esdiario que Beedigital, empresa en la que trabaja el marido de la vicepresidenta primera del Gobierno, parece ser que no cumple todos los requisitos para convertirse en agente digitalizador      

Nadia Calviño se echa una vez más la soga al cuello con los fondos europeos
Nadia Calviño PD

Nadia Calviño, vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos,  continúa en el ojo mediático por la gestión de los fondos europeos.

Esdiario, de la mano del periodista Francisco Mercado, informa que Beedigital, empresa en la que trabaja Ignacio Manrique de Lara, marido de Calviño, debe «900.000 euros al Estado».

Mercado explica que la ministra de de Asuntos Exteriores:

«Exige a los agentes digitalizadores «estar al corriente de sus obligaciones tributarias y frente a la Seguridad Social» para operar como intermediario y facturar las ayudas del fondo de 3.000 millones de la Unión Europea (Kit Digital) que reparte su ministerio para digitalizar empresas».

Sin embargo, esta condición no parece que la cumpla la empresa en la que Ignacio Manrique de Lara es el director de marketing. Así lo publican desde Esdiario:

«Pero la firma que gestiona su esposo, Beedigital, tiene una deuda con Hacienda y Seguridad Social de casi 900.000 euros en los dos últimos ejercicios registrados».

Además, de acuerdo con las afirmaciones de Francisco Mercado, «a esta deuda estatal con el Estado de la empresa» hay que añadir que:

«Sus reiterados impuestos diferidos desde 2008 a tener de bases imponibles negativas por más de 1.780 millones de euros».

Nadia Calviño

En el artículo de Francisco Mercado, también se explica que la vicepresidenta primera del Gobierno de Pedro Sánchez exige que:

«Para poder ser agente digitalizador, la empresa no esté en crisis. Más allá de los requisitos legales para juzgar cuándo una firma está en tal situación (desaparición de la mitad de los fondos propios, proceso de insolvencia…) el aroma que destila la empresa de Beedigital no es precisamente de opulencia. Todo lo contrario».

Y añade:

«La firma del esposo de Calviño admite que carece de los recursos necesarios para hacer frente a los pagos a corto plazo, situación en la que muchas empresas optan por declararse insolventes«.

2020 y 2021: dos años de deudas con el Estado

La deuda de la empresa, de la cual, gracias a Esdiario, también se supo que se enmarca dentro de una firma opaca luxemburguesa, asciende en el año 2021 y según los datos ofrecidos por Francisco Mercado a:

«267.000 euros por retenciones de IRPF no abonadas al fisco (algo que puede llegar a ser delictivo, al detraer de una nómina dinero para pagar impuestos y luego no entregarlo a Hacienda); 255.000 euros de impagos de IVA y otros 363.000 euros no abonados a la Seguridad Social. Suponían 884.000 euros impagados».

La cuentas pendientes con el Estado de esta empresa, en el año 2020, presentaban unos números muy parecidos, según Mercado, «852.000 euros».

El silencio como respuesta

Esdiario, tal y como informa el propio Francisco Mercado, ha preguntado hasta en tres ocasiones a Beedigital:

«Cuándo fue autorizado como agente digitalizador por la administración, es decir, por Red.es, entidad pública adscrita a Asuntos Económicos».

Respecta a esta cuestión, la empresa no se ha manifestado nunca. Así lo afirma Mercado y añade:

«Tampoco el departamento de Calviño permite comprobar quiénes son los designados como agentes digitalizadores para gestionar y cobrar sus fondos europeos. Esto impide conocer no sólo quiénes son los agraciados en el manejo como intermediarios de un fondo de 3.000 millones, sino las condiciones en las que han logrado tal carné de agente digitalizador y si cumplen o no con los requisitos diseñados por la propia vicepresidenta primera».

Cuca Gamarra, portavoz parlamentaria del PP, sintetizó toda esta situación el 16 de febrero de 2022 en el Pleno del Congreso, cuyas palabras recogió Esdiario:

«La única recuperación robusta, pero injusta, va a ser la de su economía familiar. Ya les contará a los españoles cómo es posible el incremento que se está produciendo, éste sí que se está produciendo, en la empresa en la que trabaja su marido y que, oh, qué casualidad, es agente autorizado en la intermediación de los fondos europeos que dependen del ministerio y de usted».

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