Tiene la socialista Francina Armengol una cara que se la pisa. En su descargo y todo hay que decirlo, cuenta que que no la pillaron borracha.
La presidenta de Baleares fue cazada tomando copas en la madrugada del 7 de octubre de 2020 incumpliendo las medidas contra la expansión de coronavirus.
Su actitud en el bar, que fue sancionado por el incumplimiento, contrasta con las quejas que presentó este miércoles en el Parlament, donde aseguró que se debían realizar «nuevos sacrificios» y acusó a aquellos que no cumplían las instrucciones de «poner a todos en peligro».
Tal y como revelan el Diario de Mallorca y Útima Hora, la presidenta disfrutó de la noche en un bar que incumplía los límites establecidos por el Govern debido a la pandemia.
De hecho, siempre según los medios baleares, la Policía local tuvo que acudir al lugar y precintar el establecimiento.
Fue sobre las dos de la madrugada cuando los agentes acudieron al bar situado en el centro de Palma tras haber sido alertados por los vecinos debido al exceso de ruido. El medio Última Hora ha publicado también el parte policial de lo sucedido donde puede leerse: «Exceso apertura horario ‘Hat Bar’ en cuyo interior había nueve clientes».
La noticia ha saltado tras las declaraciones del líder del PP en la región, Biel Company, en el Parlament balear.
La socialista Francina Armengol, de copas en un bar de Palma a las dos de la madrugada incumpliendo sus propias restricciones https://t.co/OC6IvVOGPo
— El Aguijón ? (@ElAguijon_) October 22, 2020
Si bien Company no mencionó de manera clara a la presidenta, quedó de manifiesto a quién hacía referencia:
«Lo que no puede pasar es que una conocidísima política estaba a las dos de la madrugada con su jefe de comunicación en un bar que debía estar cerrado y que la Policía local tuvo que cerrar después de las quejas de los vecinos».
A lo que, añadió:
«todos debemos estar a la altura con responsabilidad, cumpliendo los criterios, como el uso de la mascarilla, y quien no cumpla ha de responder. Pero todos, señora Armengol».
El periódico balear relata también que la llegada de los agentes provocó la respuesta del dueño del local, que aseguró no haber cerrado antes por la presencia de la propia Francina Armengol.
Se desconoce si este hecho fue incluido dentro del atestado policial.
El discurso de Company se ha producido apenas unas horas después de que Francina Armengol anunciase que en Mallorca y en Ibiza se limitarán de forma momentánea las reuniones sociales y familiares a seis personas como máximo -hasta ahora eran diez- debido al incremento de casos de Covid-19 detectado en ambas islas en las últimas semanas.
Se extravía el acta de sanción del Bar donde se produjo la polémica sobre Francina Armengol https://t.co/gwamCr3Peq vía @Uhmallorca
— Presi ????? (@Presi007) October 22, 2020
SEPARATISTA Y CATALANISTA
El Ejecutivo de la socialista Francina Armengol promueve de forma descarada los proyectos de «fomento del catalán» en Baleares.
En todos los campos y siempre con dinero público.
El Govern balear se ha olvidado del castellano para publicitar un paquete de ayudas económicas dirigidas a desempleados en plena pandemia del coronavirus. Aunque la campaña es sensible y de interés general, el Ejecutivo de la socialista Francina Armengol sólo se dirige a los que conocen la lengua catalana.
Francina Armengol sigue boicoteando cualquier intento para obtener información sobre la lengua en que se imparten las asignaturas en los colegios de las Islas.
Tres meses después de que el Defensor del Pueblo le haya reclamado todos los datos, el Ejecutivo de la socialista Francina Armengol hace oídos sordos y se niega a rendir cuentas sobre la extrema catalanización en la educación pública balear.
Ante el silencio de Armengol y sus socios de Unidas Podemos y los ecosoberanistas de Més, Francisco Fernández Marugán se ha visto obligado a hacer una nueva reclamación, ahora de urgencia, para aclarar si se están vulnerando los derechos de los alumnos y sus padres en la educación de las islas.