A falta de barones regionales con reconocimiento popular, los naranjas van a "tirar" de sus rostros con mayor experiencia televisiva
Los adelanta Javier Ruiz de Vergara en ‘Es Diario‘ este 8 de junio de 2016: en medio de la complicada situación de Cataluña, la joven lideresa naranja está brillando con luz propia y el partido de Rivera no está dispuesto a desaprovechar una de sus principales bazas:
Cuando en la medianoche de este jueves dé comienzo la campaña electoral, Ciudadanos tendrá dos rostros en primera línea: su candidato, Albert Rivera, que protagonizará la tradicional pegada de carteles, y su líder en Cataluña, Inés Arrimadas, quien a esa misma hora «peleará» en un televisivo debate a cuatro con las representantes de PP, PSOE y Podemos, Andrea Levy, Margarita Robles y Carolina Bescansa, respectivamente.
La elección de Arrimadas para esta decisiva cita en el arranque de la campaña no es casual (Inés Arrimadas deja mudos a los independentistas Puigdemont y Junqueras ).
El equipo de estrategia de Ciudadanos, que lidera José Manuel Villegas, lleva semanas detectando que la sobreexposición de Rivera en los medios y su gestión de la fallida investidura de Pedro Sánchez tras el 20-D ha afectado su imagen (Inés Arrimadas deja KO a una periodista plasta de TV3 ).
Los sondeos internos y las encuestas publicadas confirman que el candidato naranja mantiene estancadas las expectativas de su formación.
Agenda propia y presencia nacional
Por ello y por primera vez en unos comicios, en Cataluña Ines Arrimadas tendrá agenda propia, al margen de Rivera y del cabeza de lista por Barcelona, Juan Carlos Girauta.
Ciudadanos quiere aprovechar así su alta valoración en una comunidad en la que las expectativas electorales de En Comú Podem, la plataforma de Ada Colau, siguen siendo muy altas, y en la que Ciudadanos aspira a arrebatar votos a un vacilante PSC. El candidato visitará Cataluña en tres ocasiones.
Fuentes de Ciudadanos reconocen a ESdiario que, a juicio de la dirección del partido, las causas del «alicaimiento» de Rivera son cuatro: el coste de su pacto con Sánchez para un electorado claramente de centroderecha, su sobreexposición en televisión, su escasa conexión con la calle, y el endurecimiento de sus críticas contra Mariano Rajoy.
Por ello, el comité de campaña va a dar esa agenda electoral propia a Inés Arrimadas, que va a protagonizar una intensa agenda propia en Cataluña, actos en Andalucía y en otras comunidades autónomas, que compatibilizará con presencia en entrevistas y debates electorales (Inés Arrimadas: «No queremos a Podemos ni a los independentistas en el Gobierno»).
Además, a la mayor presencia mediática de Arrimadas va a contribuir el escenario surgido tras la ruptura del acuerdo entre Juntos por el Sí y la CUP que vuelve a situar a Cataluña al borde de unas elecciones anticipadas.
A diferencia de lo ocurrido el 20-D, Ciudadanos ha diseñado una campaña mucho más coral.
A falta de barones regionales con reconocimiento popular, los naranjas van a «tirar» de sus rostros con mayor experiencia televisiva: su portavoz en el Congreso, Juan Carlos Girauta; la portavoz en el ayuntamiento de Madrid, Begoña Villacís, el de la Asamblea madrileña, Ignacio Aguado, y el secretario general del grupo parlamentario, Miguel Gutiérrez.
